Ejes del desarrollo en América Latina

La infraestructura de energía, transporte, agua y saneamiento refleja las necesidades y las opciones de desarrollo de un país o sus comunidades, al mismo tiempo que encamina un futuro a veces no planificado. Su construcción, su gestión y su uso producen beneficios y efectos indeseables, no siempre identificados en los estudios previos. Ese proceso, especialmente en lo que afecta la naturaleza, que es la infraestructura madre, y las cuestiones sociales involucradas son los temas de este canal especial de IPS, que cuenta con el apoyo de la Fundación Mott.

Generación distribuida en Argentina. Complejo de 120 viviendas sociales que tienen sus techos cubiertos por paneles solares para garantizar electricidad a sus residentes.

Energía solar, esperanza para barrios pobres de Buenos Aires

Los paneles solares brillan sobre las terrazas de 10 edificios de líneas perfectamente rectas y altura uniforme. Es una imagen de modernidad que contrasta con otra a pocos metros: viviendas con distintos ambientes agregados desordenadamente, sin revestimiento exterior y con

La Central de Ciclo Combinado Centro, situada en la comunidad de campesinos nahuas de Huexca, en el centro de México, está prácticamente lista para operar, pero los pobladores de la zona lograron paralizar su apertura por la contaminación que puede ocasionar y proponen usar la instalación para una fábrica de paneles solares. Crédito: Emilio Godoy/IPS

Comunidad mexicana exige alternativa sostenible a energía sucia

Organizaciones sociales del municipio de Yecapixtla, en el centro de México, lograron detener la construcción de una gran planta termoeléctrica en la localidad y ahora diseñan un proyecto para convertir la instalación en una fábrica de paneles solares, que daría

El Morro de Santa Marta llama la atención por sus casas de vivos colores, en contraste con otras favelas, uniformadas por el predominante color rojizo de los ladrillos sin revoque. Pionero en muchas iniciativas, este barrio pobre y hacinado de esta ciudad brasileña de Río de Janeiro vuelve a serlo ahora por el desarrollo de la energía solar.

Santa Marta destapa el sol para favelas de Río de Janeiro

El Morro de Santa Marta llama la atención por sus casas de vivos colores, en contraste con otras favelas, uniformadas por el predominante color rojizo de los ladrillos sin revoque. Pionero en muchas iniciativas, este barrio pobre y hacinado de

El ingeniero de 32 años Alexander López Savrán, creador del biodigestor de cúpula fija estándar que permite crear redes de distribución a partir de materiales fácilmente disponibles en Cuba, ante uno de estos sistemas en la localidad rural La Macuca, en Cabaiguán, en Cuba. Crédito: Jorge Luis Baños/IPS

Innovación local facilita redes solidarias de biogás en Cuba

Tuberías negras de plástico, fácilmente disponibles en los anaqueles de las desprovistas tiendas cubanas, distribuyen el biogás por las casas  de la localidad rural La Macuca, en forma soterrada o por entre las hierbas y piedras de los patios de

Un grupo de casas con paneles fotovoltaicos en sus techos, en el Residencial Maria Pires Perillo, a dos kilómetros de la ciudad de Palmeiras de Goiás. Con 740 viviendas, es el mayor proyecto de energía solar en conjuntos habitacionales de interés social en el estado de Goiás, en el centro de Brasil. Crédito: Mario Osava/IPS

Energía solar corona programa de vivienda social en Brasil

“La energía solar completa mi felicidad”, celebró Divina Cardoso dos Santos, dueña de una de las 740 casas con paneles fotovoltaicos en el techo en un asentamiento residencial en las afueras de esta ciudad del centro de Brasil.

El megaproyecto del Tren Maya, en el sur de México, afectará ecosistemas fundamentales de la Península de Yucatán, que alberga 25 áreas naturales protegidas, como podría suceder con esta laguna en la reserva comunitaria de Síijil Noh Há, contigua al área preservada de Sian Ka'an. Crédito: Emilio Godoy/IPS

El Tren Maya agita a comunidades locales en México

“Si miles de personas llegan a este municipio, ¿cuál es su capacidad para atenderlos? Me da miedo ese crecimiento”, se sinceró Zendy Euán, vocera de una organización comunitaria respecto al proyecto del Tren Maya (TM), una red ferroviaria que recorrerá

Cisternas de agua de lluvia apaciguan sed de Chaco argentino

En la provincia de Salta, en el norte de Argentina, está Los Blancos, un pueblo de 1.100 habitantes en cuyos alrededores viven comunidades rurales, tanto indígenas como criollas, que sobreviven sobre todo de la pequeña actividad agropecuaria.

La jubilada Elizabeth Ribeiro planta el primer árbol de su vida, una especie de papaya silvestre, en una finca a unos 50 kilómetros de Brasilia. Plántulas donadas durante el Foro Mundial del Agua, realizado en la capital de Brasil en marzo, se sembraron en la cuenca del río Pipiripau para "producir agua", que abastece a dos ciudades cercanas. Crédito: Mario Osava/IPS

Agua, producto ambiental de la agricultura en Brasil

Solo ahora, ya jubilada como profesora de educación física, Elizabeth Ribeiro plantó el primer árbol de su vida, un jaracatia, también conocido como papaya silvestre, nativo en las sabanas centrales de Brasil.

Néstor Flores, un comunero de Quinsalakaya, a más de 4.300 metros de altura, en las alturas andinas, en el sureste de Perú, muestra la estructura con muros de ladrillos de adobe de su nueva vivienda abrigadora, a la que él y su familia se trasladarán antes de finalizar el año y que les permitirá vivir libres de frío y de humo. Crédito: Annie Solís/IPS

Casas térmicas cobijan de las heladas junto al cielo de Perú

Treinta familias de una comunidad rural a más de 4.300 metros de altura contarán con casas abrigadoras que las protegerán de las heladas que cada año causan muerte y enfermedades entre la población infantil y adulta mayor en esta región

Mireya Noa y Marciano Calamato, una pareja de productores que explotan su finca en la única zona semiárida de Cuba, en la provincia oriental de Guantánamo. Gracias a los árboles que plantaron, lograron sombrear áreas del terreno, refrescar el ambiente y contrarrestar la fuerte evaporación del agua del suelo en la ecorregión costera y semidesértica. Crédito: Ivet González/IPS

El Semiárido cubano reinventa su agro para subsistir

Con paso ágil, los agricultores Marciano Calamato y Mireya Noa desandan el terreno seco y amarillento de su finca, donde logran cosechar hasta cebollas, en el oriental Semiárido cubano, un ecosistema de características únicas.

Las comunidades de la ecorregión brasileña del Semiárido, de 1,03 millones de kilómetros cuadrados, impulsan una convivencia activa con las recurrentes sequías en su agreste territorio, que ha mejorado sus vidas y ha evitado las muertes que los asolaban en el pasado.

Convivencia y no combate con sequías del Nordeste brasileño

Las comunidades de la ecorregión brasileña del Semiárido,  de 1,03 millones de kilómetros cuadrados, impulsan una convivencia activa con las recurrentes sequías en su agreste territorio, que ha  mejorado sus vidas y ha evitado las muertes que los asolaban en

Jóvenes y periodistas de varios países latinoamericanos aprendieron, en encuentros paralelos y en diálogos conjuntos, cómo las comunidades de la del Semiárido han aprendido a convivir con esa agreste ecorregión y sus sequías, que gracias a ello dejaron de causar las mortandades del pasado.

Jóvenes y periodistas aprenden lecciones del Semiárido brasileño

Jóvenes y periodistas de varios países latinoamericanos aprendieron, en encuentros paralelos y en diálogos conjuntos, cómo las comunidades del Semiárido han aprendido a convivir con esa agreste ecorregión y sus sequías, que gracias a ello dejaron de causar las mortandades

Tocones de cocoteros que secó la última sequía en São Gonçalo, en el municipio de Sousa, en el nordeste de Brasil. En 2012, las autoridades hídricas suspendieron la irrigación, para asegurar el suministro de agua para consumo humano, ante la fuerte caída del agua embalsada, que se prolongó por cinco años más. Crédito: Mario Osava/IPS

Diversificar los cultivos ayuda a superar las sequías en Brasil

Decenas de camiones salían cada día de São Gonçalo,  llevando su producción agrícola, principalmente cocos, a los mercados de todo Brasil, incluso a las ciudades de Río de Janeiro y São Paulo, distantes más de 2.000 kilómetros.