(IPS) La policía de Dominica investigará la muerte del primer ministro izquierdista Rosie Douglas, ocurrida hace seis meses en circunstancias que crearon sospechas de que fue asesinado.
Douglas había sido un fuerte crítico del capitalismo, el colonialismo y la opresión, muy vinculado con el presidente de Cuba, Fidel Castro, y con el de Libia, Muammar Gaddafi. Antes de llegar al gobierno pasó varios años encarcelado en su país.
El 1 de octubre del año pasado fue encontrado muerto sobre el piso de su residencia en la ciudad costera septentrional de Portsmouth, cuando tenía 58 años, ocho meses después de asumir el cargo y pocas horas después de regresar de una larga gira por Gran Bretaña, Australia y Africa.
El informe oficial sobre su muerte, en el cual participaron médicos de Dominica y de otros países, indicó que había sufrido un masivo ataque cardíaco causado por hipertensión arterial, y que su corazón tenía el doble del tamaño normal.
Douglas había sido sometido cuatro días antes a un chequeo de salud en Gran Bretaña, a cargo de un médico recomendado por la embajada de Dominica en ese país, en cual no se detectó enfermedad alguna, pese a que el tamaño del corazón se percibe con facilidad en un simple examen radiológico de tórax.
El primer ministro hacía ejercicio casi todas las mañanas y jugaba en forma habitual al básquetbol.
Cabral Douglas, el hijo mayor del fallecido, insiste en que su padre fue asesinado, y ha sugerido que la estadounidense Agencia Central de Inteligencia (CIA) estuvo involucrada en el presunto crimen.
También señaló que el gobierno de Canadá había calificado a Rosie Douglas en 1976 como «un peligro para la seguridad nacional», en un documento oficial que «nunca fue rectificado».
«Debemos preguntarnos si es razonable creer que la campaña de organismos de espionaje contra Rosie Douglas se haya atenuado, en forma súbita, cuando él llegó al gobierno, y pasó a contar con poder y recursos para implementar algunos de sus proyectos izquierdistas», escribió la semana pasada en un diario local.
El destacado médico británico que lo examinó no detectó la presunta enfermedad ni síntomas de la misma, y es preciso averiguar cómo fue posible que el tamaño del corazón se duplicara en cuatro días, subrayó.
No es posible en absoluto que se haya producido una expansión cardíaca súbita y acelerada a causa de la hipertensión, enfatizó.
Cabral asegura que la muerte fue causada mediante una sustancia que agrandó su corazón, quizás en el marco de un «refinado plan de asesinato apoyado por organismos estatales».
También aseguró que el dirigente opositor nigeriano Moshood Abiola fue asesinado en la cárcel, en julio de 1998, mediante sustancias que «causaron en 48 horas la duplicación del tamaño de su corazón y la ruptura de su arteria aorta», y que ese dato es «muy interesante» para comprender la muerte de su padre.
El actual primer ministro Pierre Charles, quien reemplazó a Douglas, declaró que todos los informes sobre el caso han sido entregados a la policía, y que es probable que la investigación comience el mes próximo.
Charles aseguró que al conocer los resultados de la investigación inicial quedó «convencido por completo» de que no hubo nada irregular en la muerte de su antecesor, pero señaló su «plena disposición a realizar más averiguaciones si persiste alguna sospecha».
Las autoridades alegan que tuvieron dificultades para obtener los informes de equipos médicos de Cuba y de la Universidad de las Indias Occidentales, de Trinidad y Tobago, que participaron en el diagnóstico de las causas de la muerte de Rosie Douglas, y que la demora hizo que aumentaran las sospechas.
Charles aseguró, sin embargo, que la familia de Douglas fue informada de esos inconvenientes, y que él «no tiene absolutamente nada que ocultar».
Pero Cabral Douglas insiste en que ese tipo de informes «se lleva a cabo en no más de tres días en los laboratorios más atareados del mundo», y en que el gobierno quiso «suprimir» datos sobre lo ocurrido.
Charles, quien colaboró durante muchos años con su antecesor, no quiso comentar el contenido de los informes, pero rechazó la sugerencia implícita de que tuvo algo que ver con la muerte de Douglas.
«Pienso que el joven (Cabral) sólo busca llamar la atención y volverse famoso», apuntó.
Las declaraciones del primer ministro no han convencido a muchos dominicanos, quienes expresan sus dudas en diarios, en programas de televisión y en Internet, la red mundial de computadoras.
El diario The Chronicle publicó la semana pasada un comentario en primera plana en el cual pidió que se den divulguen «todos los informes de la autopsia, acompañados de explicaciones de las autoridades». (FIN/IPS/tra-eng/pr/da/mp/ip/01