El cogobernante Partido Socialista (PS) de Chile rechazó hoy el propósito del presidente Eduardo Frei de apelar a razones humanitarias para conseguir la libertad del ex dictador Augusto Pinochet, bajo arresto preventivo en Londres.
"Sostenemos que, precisamente, el debido proceso es el que le garamtiza (a Pinochet) el respeto a sus derechos esenciales", señaló una declaración de la Comisión Política del PS, difundida por su presidente, el senador Ricardo Núñez.
El PS puntualizó que un trato humanitario no debe confundirse con el propósito de dejar en la impunidad los crímenes que se imputan al ex dictador, bajo cuyo gobierno (1973-1990) hubo 3.190 asesinatos políticos y desapariciones forzadas.
El gobierno de Frei envió el viernes a Londres al vicecanciller Mariano Fernández, quien explorará, junto a otras vías, la posibilidad de que el gobierno de Gran Bretaña expulse a Pinochet de ese país en un gesto humanitario.
De esa manera se evitaría que el ex dictador y actual senador vitalicio sea extraditado a España, donde el juez Baltasar Garzón instruye un proceso en su contra bajo cargos de genocidio y terrorismo de estado internacional.
Fernández invocaría la avanzada edad de Pinochet, quien cumplirá 83 años el 25 de noviembre, y su delicada salud, ya que su convalescencia de una operación de una hernia discal se complicó por un cuadro diabético.
"El trato humanitario que actualmente se le está otorgando, en la mejor clínica de Londres, se lo garantizan los ordenamientos jurídicos británico y español", señaló el PS a propósito del arresto del ex dictador.
La declaración añadió que las garantías humanitarias se ejercen dentro del proceso, y que en virtud de ellas, el ex dictador podría obtener la libertad provisional por motivos de edad y salud.
Los socialistas recordaron además que el Código Penal español da darecho a los mayores de 70 años y a quienes padezcan enfermedades graves "a cumplir en el medio libre las penas privativas de libertad que se les impongan".
Pero "la impunidad no es un derecho humano", señaló el PS, uno de los cuatro miembros de la coalición gobernante, integrada además por la Democracia Cristiana del presidente Frei y los partidos Por la Democracia y Radical Socialdemócrata.
Nuñez acusó a la derechista Unión Demócrata Independiente (UDI) de ejercer "presiones ilegítimas" para crear "un cuadro de crisis política basado en la idea de que sólo la impunidad de Pinochet garantiza la estabilidad de la transición".
"Quienes fueron responsables y quienes no levantaron su voz cuando se cometían en Chile crímenes horrendos, quienes no promueven hoy gesto humanitario ninguno para encontrar el paradero de los detenidos-desaparecidos, no pueden seguir violentando la conciencia moral de la Nación", dijo el PS.
Los socialistas reiteraron que el arresto de Pinochet es una materia jurídica, distanciándose de la posición gubernamental, que califica de diplomático y político el conflicto generado con Gran Bretaña y España.
Mientras se espera que la justicia británica se pronuncie este lunes en Londres sobre un recurso de amparo que presentó la defensa del ex dictador, en Chile continúa la polarización política entre quienes apoyan y los que rechazan el arresto.
Los partidarios de Pinochet se dieron cita en la tarde de este sábado en una masiva concentración "por la dignidad nacional", convocada en el municipio santiaguino de Las Condes por el alcalde y precandidato presidencial de la UDI Joaquín Lavín.
Mientras, "la fiesta por la justicia", que tendrá lugar durante cuatro horas este domingo en el Parque O'Higgins de la capital, será la réplica de los organismos humanitarios, juveniles, sindicales y fuerzas políticas que abogan por el juzgamiento del ex dictador.
Ambas manifestaciones fueron autorizadas por el intendente (representante del gobierno) de la Región Metropolitana, Ernesto Velasco, luego de una semana de constantes acciones policiales para disolver actos callejeros en favor o en contra de Pinochet.
Los blancos de las movilizaciones derechistas fueron las embajadas, consulados y otras representaciones de España y Gran Bretaña, sometidos también al hostigamiento del alcalde del municipio de Providencia, Cristián Labbé.
El gobierno reprobó la actitud de Labbé, un ex viceministro de Pinochet, quien clausuró el viernes un centro académico británico y llamó a embanderar calles y viviendas con el pabellón chileno mientras dure el arresto del anciano general en Londres.
Las autoridades ambientales multaron también al municipio de Providencia por la decisión de Labbé de suspender el retiro de basuras de la embajada de Gran Bretaña.
Iván Moreira, un diputado de la UDI que fue alcalde designado del municipio santiaguino de San Miguel durante la dictadura, inició el viernes una huelga de hambre que mantendrá hasta la liberación de Pinochet.
"Es una ofrenda por mi patria y por el general Pinochet", dijo el parlamentario derechista, quien aseguró que el ex gobernante militar no cometió ningún delito contra los derechos humanos. (FIN/IPS/ggr/ff/hd ip/98