La Cadena de Grupos de Lecturas Afroestadounidenses ("Read-In Chain") dirigida por Jerrie Scott pugna por difundir la obra de escritoras no muy conocidas como Lucille Clifton, Venice Johnson y Jamaica Kincaid.
Scott fundó la Read-In Chain en 1990 como reacción al alto analfabetismo en las comunidades negras y latinas de Estados Unidos y, al mismo tiempo, para dar a conocer a escritores de ese origen.
La Read-In Chain franqueó las fronteras nacionales y nuevos aficionados a la lectura se gestan en los read-in creados a su imagen y semejanza en Ghana, Kenia, Islas Vírgenes y Bahamas.
Los integrantes de los read-in se reúnen para atender la lectura en voz alta de autores negros estadounidenses. En febrero, mes de la Historia Negra, escuelas, iglesias e incluso familias de todo el país son alentados a convocar en sus salones a grupos de lectores.
El "college" (universidad) de la Comunidad Hostos, en el barrio neoyorquino de Bronx, comenzó su programa de read-in este mes. La coordinadora del taller interdisciplinario de escritura Cynthia Jones tuvo en cuenta que marzo es el mes de la Historia Femenina.
Por lo tanto, enfatizó en las escritoras negras cuando previó su curso, que todos los años comienza con un pequeño texto de un autor afroestadounidense.
Libros como "Acts of Faith" ("Actos de fe"), de Iyanla Vanzant, "Heart Full of Grace" ("Corazón lleno de gracia"), de Venice Johnson, y "The Wisdom of Our Elders" ("La sabiduría de nuestros ancianos"), de Robert Fleming, fueron muy populares en las listas de literatura negra en los últimos tres años.
Jones, sin embargo, prestó especial atención el último año a libros basados en "temas específicos como identidad, raza y género". Y este mes planea abordar las cuestiones de género a través de la obra de escritoras negras.
"Homage to My Hips" ("Homenaje a mis caderas"), de Lucille Clifton, "Krik? Krak!", de Edwidge Danticat, "Autobiography of My Mother" ("Autobiografía de mi madre"), de Jamaica Kincaid, así como trabajos de Maya Angelou y Toni Morrison serán objeto de estudio.
Iliana Delgado, coordinadora del Centro de Asistencia al Alfabetismo del gobierno de la ciudad de Nueva York, afirmó que la Read-In Chain "siembra conciencia sobre los escritores negros".
La organización cuenta con un presupuesto de aproximadamente 2.000 dólares, compuesto por donaciones de personas y del Consejo Nacional de Profesores de Inglés. Esa magra suma se utiliza en el envío de programas por correo a los asistentes habituales y a posibles nuevos lectores.
Escritores célebres com Virginia Hamilton, Nikki Giovanni y Gwendolyn Brooks adhirieron a la Read-In Chain y donaron libros. Cada institución que opera de anfitriona de un read-in es responsable de la elección y adquisición del material de lectura. Las bibliotecas y las donaciones facilitan esta tarea.
La Read-In Chain va camino de convertirse en una tradición del Mes de la Historia Negra. El estado de Tennessee declaró de forma oficial los días 2 y 3 de febrero como "jornadas de las read-in afroestadounidenses".
Scott y Herald Ford, diputado por Memphis, Tennessee, gestionan ante el Congreso la declaración de las read-in como actividad de importancia nacional.
"Confiamos en que en el 2000 será una tradición. Y ya nucleamos un millón de personas", se ufanó Scott. (FIN/IPS/mr/yjc/mj/cr pr/mj