El presidente de Chile, Eduardo Frei, ratificó hoy que impulsará este año trascendentales reformas a la Constitución, mientras el ex dictador, general Augusto Pinochet, iniciaba su despedida de la comandancia del Ejército.
En la presentación de su libro "Gobernabilidad Democrática en América Latina", Frei puntualizó que entre las reformas que propondrá su gobierno están la eliminación de los senadores designados y el cambio del sistema electoral binominal.
Mientras el mandatario participaba en la ceremonia del lanzamiento de su obra, Pinochet encabezaba los actos del 86 aniversario del arma de Telecomunicaciones del Ejército, en su regimiento sede de Peñalolen, al este de Santiago.
El veterano general de 81 años se propone visitar todas las guarniciones de su arma en el país, en una prolongada gira de despedida del cargo de comandante del Ejército que ocupa desde el 23 de agosto de 1973.
Este martes, el calendario marcó simultáneamente el tercer aniversario del gobierno de Frei y el inicio del último año de Pinochet a la cabeza del Ejército, ya que deberá acogerse a retiro el 11 de marzo de 1998.
El dictador, que gobernó al país desde septiembre de 1973 hasta marzo de 1990, hizo aprobar disposiciones constitucionales transitorias que le permitieron seguir al mando de su arma pese a ser derrotado en el plebiscito presidencial de 1988.
Frei, quien inició este miércoles la segunda mitad de su sexenio presidencial, pondrá énfasis ahora en la eliminación de los "enclaves autoritarios", como se denomina a leyes e instituciones antidemocráticas heredadas del régimen militar.
Se espera que en la próxima semana el gobierno envíe al parlamento la reforma para suprimir a los senadores designados, que representan en la cámara alta a las Fuerzas Armadas, los ex ministros de estado, la Corte Suprema de Justicia, a las universidades y a la Contraloría de la República.
En un acto por el tercer aniversario del gobierno, Frei planteó este martes que el país debe contar con un Poder Lagislativo generado íntegramente por el voto popular.
Este miércoles, el gobernante puntualizó la eliminación de los senadores designados y anunció que también propondrá el cambio del sistema binominal que se aplica en las elecciones de diputados y senadores.
Este sistema, que establece la elección de sólo dos cargos en cada circunscripción senatorial o distrito de diputados, favorece a las "grandes minorías", como la que conforma la derecha con alrededor de un tercio del electorado, pero perjudica a los partidos más pequeños.
El gobierno debe proponer el regreso al sistema proporcional que se aplicaba hasta el golpe de estado de 1973, según el cual el número de diputados o senadores de cada distrito o circunscripción dependía de la cantidad de habitantes.
El ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Juan Villarzú, dijo este martes que si bien se eliminarían los senadores designados, se mantendrían, aunque "sin discriminación", los senadores vitalicios.
Las senaturías vitalicias fueron creadas también por Pinochet para los ex presidentes de la República que hubieran ejercido el cargo por un mínimo de seis años, lo cual lo convierte a él como el único favorecido con esa disposición.
La norma discrimina al ex presidente Patricio Aylwin, quien encabezó entre 1990 y 1994 el primer gobierno posterior a la dictadura, en un período reducido a cuatro años en virtud de un amplio acuerdo político para facilitar la transición democrática.
Pinochet dejó entrever hace 10 días su disposición a asumir la senaturía vitalicia cuando se retire del Ejército, mientras mantiene en la incógnita si esperará hasta el 11 de marzo de 1998 para acogerse a retiro o si anticipará esa decisión.
En todo caso, el nombre del sucesor de Pinochet debe conocerse a más tardar en diciembre próximo, estimándose que el candidato más firme a encabezar el Ejército es el actual vicecomandante, general Guillermo Garín. (FIN/IPS/ggr/ag/ip/97