GINEBRA – Enfermedades neurológicas afectan a más de 3000 millones de personas en el mundo y causan 11 millones de muertes al año, pero no reciben la atención ni los recursos que requieren su tratamiento, revela un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicado este martes 14.
En todo el mundo “más de una de cada tres personas tiene alguna afección que afecta a su cerebro, y debemos hacer todo lo posible para mejorar la atención de salud que necesitan”, observó el médico Jeremy Farriar, subdirector general de Promoción de la Salud y Prevención y Control de Enfermedades en la OMS.
“Muchas de las dolencias neurológicas pueden prevenirse o tratarse eficazmente, pero la mayoría de los afectados no tiene acceso a estos servicios. El problema es especialmente evidente en las zonas rurales y desatendidas, donde puede causar estigmatización, exclusión social y dificultades económicas”, agregó Farriar.
Menos de una tercera parte de los países tiene una política nacional para enfrentar esos trastornos, y apenas 18 % asigna presupuestos a ese campo incluyen desde accidentes cerebrovasculares hasta Alzheimer (tipo de demencia que anula la memoria, el pensamiento y otras habilidades), epilepsia o migrañas crónicas.
La médica Neerja Chowdhary, de la Unidad de Afecciones Neurológicas de la OMS, explicó al presentar el informe en esta ciudad suiza que las cefaleas, las migrañas, los accidentes cerebrovasculares, la epilepsia, el Alzheimer y la demencia son afecciones neurológicas, trastornos que afectaban el cerebro, la columna vertebral y los nervios.
Chowdary dijo que los trastornos neurológicos generalmente requieren atención de por vida y afectan no solo a la persona, sino también a su familia y cuidadores.
“Son enfermedades costosas, no solo en términos económicos, sino también en tiempo, energía y carga emocional”, enfatizó.
El informe destaca que la falta de estrategias claras deja a millones de pacientes sin diagnóstico ni tratamiento, sobre todo en zonas rurales y países de bajos ingresos.
Mostró que solo la mitad de los 194 países miembros de la OMS respondió a una encuesta sobre la materia, lo que evidencia el bajo nivel de prioridad que se le da a la neurología a nivel global.
Chowdhari indicó que en muchos países, especialmente en los de renta baja y media, la gente no puede obtener la ayuda que necesita debido a la escasez de neurólogos, el costo excesivo de los medicamentos, el estigma que suponen esas enfermedades y la prestación de servicios exclusivamente en las grandes ciudades.
Las enfermedades del área más letales y discapacitantes en 2021 fueron accidente cerebrovascular, encefalopatía neonatal, Alzheimer y otras demencias, migraña, neuropatía diabética, meningitis, epilepsia idiopática, trastornos del espectro autista, cánceres del sistema nervioso y complicación neurológica del parto prematuro.
El informe subraya que en los países de bajos ingresos, la escasez de neurólogos es dramática, con 82 veces menos especialistas que en los países ricos, lo que se traduce en millones de personas sin posibilidad de recibir un diagnóstico a tiempo, tratamiento adecuado o seguimiento médico.
Además, solo uno de cada cuatro países incluye estas enfermedades dentro de su sistema de cobertura sanitaria universal, y los servicios esenciales como rehabilitación, unidades de accidentes cerebrovasculares o cuidados paliativos suelen estar concentrados en las grandes ciudades.
Cuidadores sin apoyo y mujeres sobrecargadas
El estudio también reporta que el cuidado recae en su mayoría en familiares, sobre todo mujeres, que no cuentan con apoyo ni reconocimiento. Solo 46 países tienen servicios para cuidadores y 44 ofrecen algún tipo de protección legal.
Aunque se han logrado avances, con campañas de sensibilización y presión ante las instituciones, la OMS sostiene que aún queda mucho por hacer para reducir la estigmatización que generan estas afecciones, impulsar reformas y conseguir que millones de personas reciban la atención y el reconocimiento que merecen.
Desde 2022, la OMS impulsa un plan de acción que ofrece una hoja de ruta para reducir el impacto de estas enfermedades, con medidas que incluyen fortalecer sistemas de salud, mejorar la prevención, ampliar el acceso a servicios, involucrar a pacientes y cuidadores, y reforzar los sistemas de datos.
Pero sin voluntad política, inversión y liderazgo, el panorama seguirá empeorando, alertó la agencia sanitaria de las Naciones Unidas.
Para hacer frente a las carencias en el campo de la atención neurológica, la OMS delineó una serie de recomendaciones, la primera de las cuales es dar prioridad política a las enfermedades neurológicas.
Se solicita invertir de forma sostenida en atención y prevención, ampliar el acceso a servicios de salud cerebral, especialmente en zonas vulnerables, y mejorar los datos y sistemas de monitoreo para tomar decisiones basadas en evidencia.
A-E/HM