NACIONES UNIDAS – Una coalición de sindicatos del personal de la ONU, liderada por el Comité Coordinador de Sindicatos y Asociaciones Internacionales del Personal (Ccisua, en inglés), que aglutina 60 000 miembros, ha escrito a los Estados miembros de la ONU criticando el proceso de restructuración de la Iniciativa ONU80 por «incoherente y carente de estrategia».
El Ccisua, uno de los mayores sindicatos del organismo mundial, pide a los 193 Estados miembros que se hagan cargo del proceso de reforma de la ONU, que actualmente está en manos de un grupo de trabajo.
La Iniciativa ONU80 la lanzó Guterres en marzo, en concordancia con el 80 cumpleaños del organismo, que se cumplió el 26 de junio, con el fin de reformar y modernizar la estructura del sistema de Naciones Unidas para atender sus nuevos desafíos, dando protagonismo a la resructuración de todas sus agencias y organismos, y la reducción de su personal.
Esa reforma busca afrontar la pertinaz crisis de recursos y de presupuesto de la ONU.
Entre las diversas críticas planteadas por el Ccisua, la ONU80 es tachada de «caótica y recipitada». En su análisis, el sindicato del personal señala que la reestructuración propuesta:
- • No aborda las raíces del problema.
- • Obliga a los directivos a recortar puestos sin analizar cómo la ONU puede ser más relevante.
- • Puede que tenga que ser corregida por el próximo secretario general
- • Afectará a los servicios de primera línea (ya sea a través de la ONU80 o de la actual escasez de fondos)
- • Provocará una pérdida de capacidad, especialmente a nivel nacional
- • Demuestra un escaso conocimiento de la estructura actual del sistema de las Naciones Unidas
- • Está dirigida por un grupo de trabajo compuesto de forma arbitraria, lo que a su vez sesga los resultados
- • Su aplicación será costosa
- • Se está llevando a cabo sin consulta.
La carta de la coalición sindical insta a los Estados miembros de la ONU a asumir un mayor control del proceso.
Por otra parte, los sindicatos del personal de la Secretaría General escribieron al presidente de la Asamblea General solicitando que se abordara la cuestión de la ONU80 con los Estados miembros.
«Más cerca de Ginebra, un buen ejemplo de los problemas de coherencia de la ONU80 es la reducción de las oficinas sobre el terreno vinculadas al Alto Comisionado de las Naciones Unidas sobre Derechos Humanos, mientras se amplían las oficinas de Viena con el pretexto de acercarse a aquellos a quienes servimos», dicen.
Los sindicatos también critican que el secretario general haya nombrado a su asesor especial, Guy Ryder, para dirigir la ONU80. «Seguiremos con nuevas medidas para contener el daño causado por la iniciativa del señor Ryder», afirma la carta.
Guy Candusso, exvicepresidente primero del Sindicato del Personal de las Naciones Unidas en Nueva York, dijo a IPS que el proceso de reforma suele estar en manos de quienes quieren proteger sus propios intereses.
«Desde la salida del subsecretario general Joseph Connor, la ONU se ha vuelto muy pesada, con una proliferación de puestos D2 y superiores. Las reformas propuestas ya están impulsadas por la política», aseguró.
En La ONU rigen varios niveles de personal fijo (de P2 a P7) y dos niveles de directores (D1 y D2, el más alto), donde el primero requiere un mínimo de 15 años de experiencia en el sistema.
Para Connor, poner la restructuración de la ONU en manos de los Estados miembros, no va a ayudar, ya que todo se reduce al dinero. «Si no se aportan los fondos, no veo un buen futuro para el personal», afirmó.
Mientras tanto, Laura Johnson, secretaria ejecutiva, e Ian Richards, presidente del Sindicato del Personal de las Naciones Unidas en Ginebra, han proporcionado información actualizada sobre los últimos acontecimientos relacionados con la Iniciativa ONU80.
El Comité de Gestión del Personal (SMC), órgano mundial de consulta entre la dirección y los sindicatos del personal, se reunió la primera semana de julio en la sede de la Misión de las Naciones Unidas en Kosovo.
En primer lugar, a pesar de sus repetidas afirmaciones ante la Asamblea General y el personal, la dirección del SMC no presentó a los sindicatos propuestas detalladas sobre la ONU80 (incluidos los recortes presupuestarios de 20 %, que se aplican al presupuesto ordinario (RB) y a los puestos de mantenimiento de la paz) y no quiso consultar a los representantes del personal sobre la ONU80.
La única excepción a esto fue un debate circular e incompleto sobre posibles medidas paliativas para ayudar al personal afectado por los recortes o los traslados, una vez que la Asamblea General tome una decisión definitiva sobre el presupuesto para 2026 a finales de este año.
«Pedimos a la dirección que corrigiera sus errores de comunicación sobre la consulta a los sindicatos, pero hasta ahora se ha negado a hacerlo», dijeron.
Ante esta situación, los sindicatos del personal se han visto obligados a entablar contactos informales directamente con los Estados miembros. En cuanto a las medidas paliativas, estas siguen sujetas a aprobación definitiva, pero en líneas generales son las siguientes:
- • En julio/agosto, se ofrecerán indemnizaciones por cese acordadas al personal que tenga más de 55 años a finales de año.
- • Ningún miembro del personal tendrá que trasladarse antes del 30 de junio de 2026 y, si es posible, se podrá realizar la incorporación a distancia y teletrabajar hasta tres meses desde los lugares de destino originales.
- • Si el presupuesto aprobado para 2026 cuenta con más personal que puestos para una entidad concreta, esta deberá activar la política de reducción de plantilla y crear grupos de gestión del personal para llevar a cabo un examen comparativo con el fin de determinar el orden de permanencia del personal. Esto tendrá lugar entre enero y febrero de 2026. También se adoptarán medidas para garantizar la renovación de los contratos de duración determinada del presupuesto ordinario que expiren antes de esa fecha.
- • El personal que se separe del servicio podrá optar por un permiso especial sin sueldo por un período que se determinará.
- • También se señalará en Inspira la prioridad de selección del personal del grupo de retención 1 de la revisión comparativa si posteriormente se crean nuevos puestos. Previo acuerdo del secretario general, este período de señalización se prorrogará más allá de lo establecido en la política de reducción de personal como medida excepcional.
- • Si se trasladan puestos, incluso a una plataforma administrativa común, el personal normalmente se trasladaría con su puesto. Si el personal no desea trasladarse, otro personal adecuado podría ofrecerse voluntario.
«La falta de carácter definitivo de estas medidas y la falta de consideración de las propuestas presentadas por los sindicatos ha sido frustrante y creará más ansiedad, como hemos dejado claro a la dirección», se afirma en la carta de Ccisua.
Además de los recortes en los puestos del presupuesto ordiario o RB y del mantenimiento de la paz (20 %), la fase inicial de ONU80 establecerá plataformas administrativas comunes (CAP, en inglés), primero en sus mayores sedes, en Nueva York y Ginebra, y luego en otros lugares.
Los sindicatos solicitaron repetidamente aclaraciones sobre las CAP, ya que es probable que se reduzcan los puestos administrativos en toda la Secretaría de las Naciones Unidas y se rescinda los nombramientos, lo que requerirá la activación de la política de reducción de personal.
En particular, «solicitamos más explicaciones sobre cómo se gestionará el orden de permanencia de los puestos administrativos en los distintos lugares de destino, entidades y fuentes de financiación, pero no obtuvimos aclaraciones».
Está claro que la decisión de la Asamblea General sobre el presupuesto para 2026 será fundamental. Por lo tanto, los sindicatos del personal han estado en contacto informal con los Estados miembros.
La carta enviada por la Ccisua destaca las graves consecuencias de la Iniciativa ONU80 para la prestación de servicios, su falta de visión y la sensación de que los miembros del grupo de trabajo estaban utilizando el proceso para sus propios fines.
También cuestiona cómo la ONU80 resolverá la situación de liquidez que desencadenó la iniciativa.
Puede leer aquí la versión en inglés de este artículo.
Muchas de estas preocupaciones fueron mencionadas por los Estados miembros durante una reunión informativa informal celebrada a comienzos de julio en la Asamblea General. Un Estado miembro también ha distribuido un proyecto de resolución para que los Estados miembros tengan una mayor supervisión del proceso.
Además, según la carta, Guy Ryder se ha retractado de sus anteriores posiciones en la iniciativa, creando más confusión sobre el proceso. Afirmó que las propuestas presupuestarias con recortes de 20 % eran para que los jefes de las entidades reflexionaran sobre cómo podían reducir los gastos.
Aseguró, además, que el secretario general no aplicará necesariamente todos estos recortes y el presupuesto definitivo reflejará sus prioridades.
Cuando se le preguntó cuáles eran esas prioridades, Ryder respondió que no podía responder.
«Nuestro compromiso con los Estados miembros no ha estado exento de consecuencias. La dirección afirmó en el Comité de Gestión y Presupuesto que los sindicatos habían infringido el reglamento del personal y reprendió a los sindicatos por cumplir su función de defensa», dice Ccisua.
Cita como ejemplo que la dirección de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), «ha intentado intimidar a su representante del personal».
«Denunciamos esta acción y dejamos claro que el reglamento del personal, las normas de conducta y la resolución 67/255 de la Asamblea General permiten explícitamente este importante compromiso», asegura Ccisua.
Y añade: «Seguiremos informándoles y luchando para revertir esta reforma perjudicial e innecesaria. El secretario general debería salvar a la ONU. Creemos que Guy Ryder está haciendo lo contrario».
T: MF / ED: EG