Un campamento de personas desplazadas por la confrontación entre guerrillas y el ejército en el oriente de Myanmar. El país del sudeste asiático está inmerso en una profunda crisis, de colapso económico, pobreza, migración, lucha armada y deterioro del medio ambiente, cuatro años después del golpe con el que los militares asumieron el poder. Imagen: Siegfried Modola / Ocha