Una manifestación de familiares de detenidos en las redadas masivas en El Salvador, que han llevado a la cárcel a más de 83 000 personas. Amnistía Internacional documentó casos en los que las detenciones se practicaron por un sistema de cuotas asignadas a la policía, o bien de modo discriminatorio contra individuos con tatuajes o residentes de vecindarios pobres afectados por la violencia de las pandillas, conformando un cuadro de violación de derechos humanos. Imagen: Movir