Aumenta ligeramente el crecimiento económico de Asia

Una vista de la calle Pham Ngu Lao en ciudad Ho Chi Minh, antigua Saigón, en Vietnam, uno de los países de Asia con mejores tasas de crecimiento económico previstas para este año y el próximo. El Banco Asiático de Desarrollo registra que en la región un incremento de las exportaciones, en particular de artículos electrónicos, compensa la resiliencia en la demanda interna. Imagen: The Climate

MANILA – El Banco Asiático de Desarrollo (BAD) elevó ligeramente este miércoles 17 su previsión de crecimiento económico para los países en desarrollo de Asia y el Pacífico este año, de 4,9 a cinco por ciento, al considerar un aumento de las exportaciones que complementa la resiliencia de la demanda interna.

Albert Park, economista jefe del BAD, dijo al presentar la actualización que “la mayor parte de Asia y el Pacífico está experimentando un crecimiento económico más rápido en comparación con la segunda mitad del año pasado”.

La perspectiva de crecimiento para el próximo año se mantiene en 4,9 %.

Se pronostica que la inflación se desacelerará a 2,9 % este año (3,3 % en 2023), en medio de la disminución de los precios mundiales de los alimentos y los efectos persistentes de las tasas de interés más altas.

Tras una recuperación pospandémica impulsada principalmente por la demanda interna, las exportaciones están repuntando y contribuyendo a impulsar el crecimiento económico de la región.

La fuerte demanda mundial de productos electrónicos, en particular de semiconductores utilizados para aplicaciones de alta tecnología e inteligencia artificial, está impulsando las exportaciones de varias economías asiáticas.

“Los fundamentos de la región siguen siendo sólidos, pero los responsables de las políticas aún deben prestar atención a una serie de riesgos que podrían afectar las perspectivas”, dijo Park.

Esos riesgos “van desde la incertidumbre relacionada con los resultados electorales en las principales economías hasta las decisiones sobre las tasas de interés y las tensiones geopolíticas”, consideró el especialista.

Si bien la inflación se está moderando hacia niveles previos a la pandemia en la región en su conjunto, las presiones sobre los precios siguen siendo elevadas en algunas economías.

La inflación de los precios de los alimentos sigue siendo alta en el sur de Asia, el sudeste asiático y el Pacífico, en parte debido a las condiciones climáticas adversas y a las restricciones a la exportación de alimentos en algunas economías.

El pronóstico de crecimiento para China, la mayor economía de la región, se mantiene en 4,8 % este año. La víspera, el Fondo Monetario Internacional (FMI) hizo un cálculo algo más optimista, de cinco por ciento, y tanto el BAD como el FMI sitúan el crecimiento de la economía china en 4,5 % para 2025.

 

En China una recuperación continua del consumo de servicios y unas exportaciones y una actividad industrial más fuertes de lo esperado respaldan la expansión, aun cuando el sector inmobiliario, que atraviesa dificultades, aún no se ha estabilizado.

El gobierno chino introdujo medidas políticas adicionales en mayo para apoyar el mercado inmobiliario, recordó el reporte del BAD.

Las perspectivas para India, la economía de más rápido crecimiento de la región, también se mantienen sin cambios en siete por ciento para el año fiscal 2024, un estimado idéntico al del FMI, y crecimiento aún mayor, de 7,2 %, en 2025.

Se proyecta que el sector industrial de India crecerá de manera sólida, impulsado por la industria manufacturera y la fuerte demanda en la construcción.

Se espera que la agricultura se recupere en medio de pronósticos de un monzón por encima de lo normal, mientras que la demanda de inversión sigue siendo fuerte, liderada por la inversión pública.

En el sudeste asiático, la previsión de crecimiento se mantiene en 4,6 % en 2024, con sólidas mejoras tanto en la demanda interna como en la externa. El año próximo el conjunto crecería 4,7 %, y Filipinas y Vietnam tendrían la tasa más alta, de 6,2 %.

La previsión de este año para el Cáucaso y Asia central se eleva a 4,5% desde una proyección anterior, en abril, de 4,3%, impulsada en parte por un crecimiento más fuerte de lo esperado en Azerbaiyán y la República Kirguisa.

En el Pacífico, la perspectiva para 2024 se mantiene en un crecimiento de 3,3%, impulsada por el turismo y el gasto en infraestructura, junto con la reactivación de la actividad minera en Papúa Nueva Guinea.

En todo el mundo las perspectivas del FMI son de un crecimiento global de 3,2 % este año y de 3,3 % el próximo. Sus previsiones para América Latina y el Caribe son más bajas, con crecimiento de apenas 1,9 % en 2024 y de 2,7 % en 2025.

A-E/HM

 

 

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe