La multitud de terroristas, como son denominados por autoridades y la prensa, ocupan primero la sede del Congreso Nacional, en sus ramblas y techo. Luego invadieron los auditorios, oficinas y museo del Senado y la Cámara de Diputados, destruyendo todo, incluso material histórico como fotos y documentos.
Fotos Públicas Foto: Marcelo Camargo/Agência Brasil.