EL CAIRO – La cuenta atrás para la 27 Conferencia de las Partes (COP27) sobre cambio climático, que tendrá lugar en Egipto, del 6 al 18 de noviembre, ha comenzado y la pregunta es si esta cumbre anual dará comienzo a una nueva era en el cumplimiento de los compromisos con el Sur global para que sus países puedan adaptarse y mitigar los impactos de la crisis.
La cumbre congregará entre el 6 al 18 de noviembre en la ciudad balnearia de Sharm el Sheij a líderes mundiales, altos funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), negociadores de los gobiernos y miles de activistas medioambientales de todo el mundo.
Unos 90 jefes de Estado y de gobierno de las 197 países y otras partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) confirmaron su comparecencia en la cumbre, que debe tomar nuevas medidas para limitar el impacto de la actividad humana en el clima, según el representante especial de la presidencia egipcia para la COP27.
Amr Abdel Aziz, director de Mitigación del Ministerio de Medio Ambiente de Egipto, señaló que el tema central de la COP27 es la aplicación de las medidas ya comprometidas y que siguen pendientes de cumplimiento.
“Esperamos demostrar cómo es eso en términos de mitigación y adaptación. Si la cumbre puede abordar el tema de la aplicación en todos sus debates, será una señal de su éxito», dijo Abdel Aziz en diálogo con IPS.
El objetivo principal de la COP27 es lograr resultados positivos en cuanto a la reducción de emisiones; en el orden del día figura también un debate sobre la financiación de las pérdidas y los daños.
“También tenemos la intención de avanzar en la agenda para duplicar la financiación de la adaptación al clima para 2025 y llegar a un acuerdo sobre la promesa financiera de 100 000 millones de dólares (anuales) incumplida por los países desarrollados» para las naciones del Sur en desarrollo, dijo Abdel Aziz.
El objetivo general de los anfitriones es lograr un equilibrio entre los intereses de todas las partes.
El programa de mitigación, por ejemplo, está impulsado principalmente por los países del Norte industrial y los pequeños estados insulares en desarrollo (Peid), que ya están experimentando graves impactos del cambio climático.
Por otro lado, los mercados emergentes son los principales responsables de los ajustes, las pérdidas y los daños.
“Nuestro objetivo es lograr un resultado equilibrado que cumpla todas estas metas y objetivos”, continuó el coordinador egipcio de la COP27.
Citó como ejemplo de los esfuerzos para afrontar la crisis climática al país anfitrión, donde, explicó Abdel Aziz, «queríamos cubrir la mayor parte posible de las emisiones totales”. Por ello, añadió, “nos centramos en tres sectores: energía, petróleo y gas, y transporte. También hemos elegido las industrias con más posibilidades de reducir las emisiones».
El funcionario egipcio se mostró optimista sobre el cumplimiento de los objetivos, especialmente en el sector del transporte, que podría incluso ser superados, ya que se han producido avances significativos, incluso en el ámbito de la «electrificación del transporte y otras formas de movilidad sostenible».
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Las principales prioridades de la cumbre son alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y avanzar en la lucha contra el cambio climático, para que se cumpla el objetivo de las investigaciones científicas de limitar el calentamiento global a 1,5° C para 2030. Para ello es necesario reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la mitad para entonces.
“Para que esto ocurra, debe haber financiación para el clima», dijo a IPS el director del programa de la 17 Conferencia Anual de la Juventud (COY17), Hossam Imam.
La COY17 es organizada por el grupo oficial de jóvenes dentro de la CMNUCC, conocido como “Participación de los jóvenes en la acción mundial” (Youngo, en inglés). El encuentro de este año tendrá lugar como una de las actividades paralelas de las sesiones oficiales de la COP27 en Sharm el Sheij.
En esa cita 1500 jóvenes de 140 países redactarán la declaración de los jóvenes, que será entregada a la presidencia de la Cumbre del Clima y debatida por los delegados gubernamentales.
“El impacto del cambio climático sobre los pueblos indígenas y los habitantes de las ciudades costeras que se enfrentan a las inundaciones es uno de los temas más urgentes que se abordarán en la COY17”, dijo Imam.
El activista medioambiental Ahmed Fathy dijo a IPS que el obstáculo más importante para que los países en desarrollo alcancen sus objetivos climáticos es la «falta de financiación adecuada de los países desarrollados».
Y, a pesar de años de incumplimiento de los compromisos adquiridos, remarcó que “la financiación de la adaptación sigue siendo una prioridad absoluta para los países en desarrollo. Sin ella, los países en desarrollo no pueden combatir y mitigar los efectos del cambio climático”.
El valle y el delta del Nilo, donde reside cerca de 95 % de la población egipcia, solo representan 4 % de la superficie natural del país. Se prevé que el cambio climático ejerza presión sobre estas zonas, especialmente el propio curso fluvial, y la región podría sufrir sequías más frecuentes.
“Egipto es también uno de los pocos países que luchan contra la escasez crónica de agua», añadió Fathy.
Este fundador de la organización “La Juventud Ama a Egipto analizó que “el mundo se enfrenta a varios problemas económicos además de la crisis energética”, pero pese a eso “esperamos que la conferencia produzca propuestas viables».
“Esperamos que la cumbre produzca una carta viable y que sea una COP de acciones en lugar de una COP de promesas”, concluyó el también miembro de Youngo y uno de los organizadores de la COY17.
T: MF / ED: EG