El Perú está abordando el cambio climático con el necesario sentido de urgencia y ambición, en vísperas de su bicentenario. Esta respuesta inclusiva, multisectorial, multinivel y multiactor busca despertar en cada uno de nosotros la generación de nuevas oportunidades.
El cambio climático, al igual que la covid-19, establece un antes y un después para toda la humanidad y, sin duda, abre las puertas de un camino hacia el desarrollo sostenible que genere bienestar a todas y todos los peruanos.
[pullquote]3[/pullquote]En ese contexto, la Huella de Carbono Perú es la iniciativa liderada por el gobierno para reconocer el esfuerzo de organizaciones públicas y privadas en la reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
Con ello se logra contribuir a alcanzar la meta de 35% de reducción de GEI, establecida en las Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC, en inglés) al año 2030.
Con el fin de incentivar a que más organizaciones se sumen a la Huella de Carbono Perú, se ha creado un personaje simbólico. Se trata de Nono, un curioso y observador oso de anteojos peruano que busca y vigila las huellas de carbono que dejan las empresas con la ayuda de sus grandes lentes.
Además, motiva a que nuevas organizaciones se sumen a esta iniciativa ambiental mediante la plataforma creada para tal propósito. De esta manera, dejarán constancia de sus aportes para enfrentar la crisis climática y contribuir a la construcción de un país resiliente y bajo en carbono.
A la fecha son 165 las organizaciones que ya se han inscrito a la plataforma y 61 las que han calculado sus emisiones de GEI.
La meta para el bicentenario de la independencia, en julio de 2021, es llegar a las 100 organizaciones que hayan medido su huella de carbono, fortaleciendo así a la acción climática del país y demostrando que las empresas, en un contexto de covid-19, están migrando cada vez más hacia una nueva convivencia que respete el medio ambiente.
El Ministerio del Ambiente busca transmitir un claro mensaje: el cambio climático es un hecho que nos debe preocupar tanto como la pandemia de covid-19, que actualmente amenaza la salud de toda la humanidad.
Hoy el oso Nono necesita de la ayuda de todos los ciudadanos para que, a través de sus redes sociales, promuevan su mensaje e inviten personalmente a las marcas a sumarse al sentido de urgencia y ambición que tiene el Perú para hacer frente al cambio climático.
Nono, el oso de la Huella de Carbono Perú, forma parte del trabajo que se está realizando en el país por medio del Paquete de mejora de la Acción Climática (CAEP, en inglés).
CAEP es una iniciativa de NDC Partnership, una coalición mundial de más de 180 países e instituciones, que apoya a los países para mejorar la calidad, aumentar la ambición, y acelerar la implementación de las NDC.
También cuenta con el apoyo del Proyecto para la Implementación de las Metas Climáticas del Perú (NDC Support Programme), que es implementado por el Ministerio del Ambiente, con la asistencia técnica del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, y forma parte de la Iniciativa Internacional de Protección del Clima (IKI).
La labor realizada en el marco del CAEP refuerza la visión integral del Perú para la gestión del cambio climático, abordando cinco dimensiones: (1) fortalecimiento del marco institucional; (2) implementación multisectorial; (3) implementación multinivel; (4) trabajo multi-actor; y (5) financiamiento de la NDC.
A través de esta iniciativa, el Perú trabaja con diversos socios como Fundación Avina, el Instituto Global para el Crecimiento Verde, ICLEI- Gobiernos Locales para la Sostenibilidad, SouthSouthNorth y su socio local Libélula, el Fondo de las Naciones Unidas para el Desarrollo del Capital, y el Fondo Mundial para la Naturaleza.
El trabajo incluye, a modo de ejemplo, el desarrollo de planes de implementación sectoriales, la preparación de inventarios de emisiones a nivel regional, programas de capacitación a varios niveles, elaboración de una propuesta técnica para la Estrategia Nacional ante el Cambio Climático 2050, diseño de un sistema de reporte y monitoreo para el financiamiento climático internacional, el diseño de un fondo de garantía para las inversiones climáticamente responsables y, por supuesto, la sensibilización y apropiación de diversos actores de la sociedad, a través de campañas como la de Nono.
El trabajo realizado por medio del CAEP forma parte de la amplia y ambiciosa gestión del Perú para catalizar un cambio transformador hacia un desarrollo resiliente, sostenible y bajo en emisiones. El involucramiento del sector privado en la acción climática es esencial y conlleva una relación ganar-ganar.
Existe una demanda creciente de productos y servicios altamente eficientes y con bajo contenido en carbono. Gracias a la Huella de Carbono Perú, las organizaciones aminoran sus costos y promueven la innovación, la mejora de su reputación y el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 13: “Acción por el clima”.
La voz de Nono es hoy la voz de todos. El tiempo de actuar es ahora. Compartamos su mensaje y dejemos una huella positiva.
#QueLasEmpresasSeSumen
Kirla Echegaray Alfaro, ministra del Ambiente de Perú, tiene un título en leyes y una maestria y especialización en administración y políticas públicas. Cuenta con más de 15 años de experiencia trabajando con el gobierno en temas de ambiente, tecnología, y salud.