Los líderes mundiales que participarán en la Asamblea General de las Naciones Unidas y las cumbres que se realizarán en torno a ella desde el día 23, deberían escuchar con más atención a los científicos si quieren abordar el cambio climático y cumplir con los objetivos para reducir la pobreza y avanzar hacia un desarrollo sostenible, advirtieron expertos de la ONU.
Shantanu Mukherjee, del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), dijo que los jefes de Estado y de gobierno que se congreguen en Nueva York para debatir en torno al desarrollo y el cambio climático deben impulsar acciones concretas para evitar una calamidad planetaria.
Los políticos deben comenzar a «reconocer el impacto de la ciencia y la política y fortalecerlo entre las personas que están aquí para que se convierta en una base confiable para la toma de decisiones», dijo Mukherjee ante preguntas de IPS.
«Sería genial si hay un compromiso entre los líderes que vienen aquí, más si parte de ellos toman en serio adoptar medidas políticas, apoyadas con evidencia científica que le suministraremos”, dijo.
Los ambientalistas han expresado su temor de que los líderes vacilen en sus compromisos de luchar contra el cambio climático, señalando a escépticos de países importantes en la toma de decisiones, como los presidentes de Brasil, Jair Bolsonaro, y de Estados Unidos, Donald Trump.
Mukherjee habló con periodistas tras publicarse en Nueva York el día 11 el informe “El futuro es ahora: la ciencia al servicio del desarrollo sostenible”, que alerta sobre la profundización de las desigualdades y el daño irreversible a los ecosistemas.
El documento de 250 páginas dice que la humanidad aún puede alcanzar los17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que conforman la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, para acabar con la pobreza y otras 168 metas.
Pero para lograrlo es indispensable impulsar los esfuerzos para reducir los desperdicios, la la contaminación y la desigualdad.
Entre 2017 y 2060, se espera que el consumo mundial anual de bienes materiales aumente de 89 a 167 gigatoneladas, lo que conducirá a más emisiones de gases de efecto invernadero y al incremento de la extracción de recursos, incluida la minería, dijeron los investigadores.
Mientras tanto, se espera que la población mundial alcance 8.500 millones de personas para 2030, lo que significa más bocas que alimentar y una mayor demanda de las centrales eléctricas, la mayoría de las cuales aún bombean dióxido de carbono a la atmósfera.
Endah Murniningtyas, un exministro indonesio que ayudó a escribir el informe, dijo que producir comida suficiente y mantener el aumento global de las temperaturas por debajo de una cifra de referencia de dos grados centígrados podría resultar imposible.
“Esto no es inevitable. Ya tenemos el conocimiento y los medios para cambiar y asegurar que todo nuestro bienestar [se mantenga] incluso cuando reduzcamos los impactos adversos «del cambio climático», dijo Murniningtyas a los periodistas.
«Centrarse en la política debe permitir un acceso global equitativo a los alimentos y maximizar el valor nutricional de los productos y, al mismo tiempo, minimizar el impacto climático y ambiental de la producción», añadió.
El informe fue redactado por un grupo independiente de 15 científicos. El documento estará en el centro de los debates de alto nivel sobre la acción climática y los ODS, que comenzarán el 23 de septiembre, cuando Nueva York acogerá una histórica semana de cumbres.
Peter Messerli, director del Centro de Desarrollo y Medio Ambiente de la Universidad de Berna, en Suiza, dijo que los líderes deben comenzar a cambiar la forma en que diseñamos ciudades, aprovechamos la energía y alimentamos a las poblaciones en crecimiento.
«Todos estos sistemas son actualmente que podemos decir hasta cierto punto disfuncionales, pero mantienen la promesa de que si abordamos esas compensaciones, de esa manera, realmente aprovecharán la transformación», planteó Messerli a los periodistas.
Pero los gobernantes que asistirán a la primera y la más esperada de las cumbres, la de Acción Climática, el 23 de septiembre , y a las demás citas cimeras, se verán inundados por otros temas candentes y prioritarios en la agenda internacional, dijo Messerli, como las guerras en Siria y Yemen.
“No cambiaremos el mundo. Pero necesitamos cambiar de opinión en esta dirección. Porque si cambiamos de opinión, creo que podemos cambiar el mundo «, dijo Messerli, coautor del informe.
Bolsonaro y Trump son los primeros dos líderes en la lista para hablar en la jornada inaugural de la Asamblea General de la ONU, el 24 de septiembre, seguidos poco después por el presidente egipcio Abdel Fattah al Sisi y otros.
La activista sueca para el cambio climático, Greta Thunberg, llegó a Nueva York el 28 de agosto, tras atravesar en un velero el océano Atlántico, para participar en la cumbre climática y presionar a los líderes mundiales para que acojan todo lo que implica su lema de “unirse detrás de la ciencia».
T: MF