El partido gobernante de este país, la Unión Nacional Africana de Zimbabwe-Frente Patriótico (ZANU-PF), está inmerso en conflictos internos que desvían su atención de áreas de desarrollo clave, a pesar de que en diciembre de 2015 se termina el plazo para cumplir con los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) fijados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los ocho ODM que deberán alcanzarse para esa fecha forman parte de un plan convenido por todos los países y las instituciones de desarrollo más importantes del mundo.[pullquote]3[/pullquote]
El ZANU-PF libra una lucha de sucesión previa al congreso electivo del partido gobernante en diciembre, ahora que los problemas de salud aquejan al presidente Robert Mugabe, de 90 años y mandatario de este país de África meridional desde su independencia en 1980.
«Todas las áreas de desarrollo están paralizadas mientras los políticos del ZANU-PF luchan por suceder al avejentado Mugabe y al parecer se olvidaron de los ODM que el país también debe alcanzar antes del plazo límite de 2015”, aseguró el experto en desarrollo Agrippa Chiwawa.
La batalla de sucesión enfrenta al ministro de Justicia Emerson Mnangagwa con la vicepresidenta Joice Mujuru. El primero tiene la simpatía de los Mugabe, y la primera dama Grace Mugabe reclamó la dimisión inmediata de su rival, Mujuru, antes del congreso del ZANU-PF.
Chiwawa dijo a IPS que, aunque el gobierno aplacó recientes huelgas de los médicos al elevar sus salarios, el sector de la salud pública está en un estado de decadencia con una grave escasez de medicamentos.
Elmond Bandauko, un analista político independiente, concuerda con Chiwawa. «Las peleas internas del partido ZANU-PF son obstáculos para la prosperidad nacional, social y económica. El gobierno se concentra solo en sus batallas de sucesión mientras la economía está de rodillas y no hay una solución proyectada para los problemas económicos que enfrenta el país en este momento», sostuvo en diálogo con IPS.
«Los responsables políticos del gobierno del ZANU-PF, que presuntamente deberían celebrar debates y sesiones parlamentarias y reuniones especiales para sacar adelante al país, pierden el tiempo en rencillas políticas que no toman en cuenta los intereses de los zimbabuenses», añadió Bandauko .
Tampoco el sistema educativo se libró del momento político del país, según la opinión de educadores.
«Nadie habla de reformar el sistema educativo ya que los funcionarios responsables están ocupados consolidando su poder en el partido gobernante, mientras que los exámenes nacionales pierden rápidamente su credibilidad por la fuga de datos de los mismos antes de que se realicen”, declaró un alto funcionario del Ministerio de Educación, que pidió mantener su nombre en reserva por miedo a las represalias.
Incluso los agricultores de subsistencia, como Edson Ngulube, de la sudoriental provincia de Masvingo, sienten el impacto del fracaso de los políticos. «No podemos vencer al hambre y la pobreza sin el apoyo del gobierno con los insumos agrícolas”, aseguró Ngulube.
A muchos zimbabuenses como Ngulube el cumplimiento de los ODM les ofrece los medios para una vida mejor, con acceso a los alimentos e ingresos adecuados.
Más de la mitad de los 13 millones de habitantes del país pasan hambre. No obstante, Zimbabwe se comprometió a erradicar ese flagelo para 2015.
El coordinador subregional para África meridional de laOrganización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), David Phiri advirtió en septiembre que Zimbabwe podría incumplir el objetivo de erradicación del hambre para 2015 a causa de los conflictos y los desastres naturales.
El censo nacional de 2012 reveló que más de dos tercios de la población viven en zonas rurales y, según elPrograma Mundial de Alimentos, este año 25 por ciento de ellos necesitarán ayuda alimentaria o morirán de hambre. En 2015 habrá 2,2 millones de zimbabuenses necesitados de esa asistencia.[related_articles]
No obstante, el ministro de Agricultura, Joseph Made, confía en que el país acabará con el hambre antes de la fecha límite de 2015. «Tenemos tierra y tenemos gente trabajadora y… no hay ninguna razón para dudar de que para el año 2015 habremos erradicado el hambre”, declaró a IPS.
Claris Madhuku, director de la Plataforma de Desarrollo de la Juventud (PYD), un grupo de presión prodemocrático, percibe las cosas de forma diferente.
«El fracaso de Zimbabwe para conseguir los ODM se debe a la actual crisis de gobierno, como consecuencia de las guerras internas del gobernante ZANU-PF para suceder al presidente nonagenario del partido, las que no facilitaron el desarrollo», afirmó.
Según el líder de la PYD, para que el desarrollo despegue en Zimbabwe, «el partido de gobierno tendrá que acertarle a su política”.
Pero como al parecer el presidente Mugabe permanece aferrado al timón del partido gobernante, está por verse si el desarrollo real llegará alguna vez a este país.
Editado por Phil Harris / Traducido por Álvaro Queiruga