Activistas proisraelíes de Estados Unidos declararon su apoyo incondicional a la campaña militar de Israel en la Franja de Gaza, en un encuentro multitudinario celebrado en esta capital al que asistió una larga lista de legisladores y diplomáticos cuyos discursos minimizaron las tensiones entre los gobierno de los dos aliados.
Figuras clave de los partidos Republicano (opositor) y Demócrata (gobernante) en el Congreso legislativo de este país expresaron opiniones similares: que Israel ejerce su derecho de legítima defensa y que toda la culpa de las hostilidades iniciadas el 8 de julio recaen sobre el movimiento islamista palestino Hamás.
Los oradores también le recordaron al público presente que Hamás tiene el respaldo de Irán, en lo que un mensaje apenas velado al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.[pullquote]3[/pullquote]
La asesora de seguridad nacional, Susan Rice, representó a Obama en el evento celebrado el lunes 28 en Washington que se denominó la Asamblea Nacional de Liderazgo por Israel.
Un manifestante, Tighe Berry, interrumpió el discurso de Rice con el grito de “¡Terminen con el asedio a Gaza!», mientras levantaba un cartel con las mismas palabras. Lo acompañaba un grupo de protesta fuera del edificio de la organización pacifista Code Pink.
Una vez que a Berry lo retiraron por la fuerza, Rice pronunció el punto de vista de la Casa Blanca.
«Estados Unidos apoya un alto al fuego humanitario inmediato y sin condiciones… que debe conducir al cese definitivo de las hostilidades basado en el acuerdo de noviembre de 2012”, declaró.
La declaración difería de la postura israelí y la de casi todos los oradores en el evento. Aunque Israel aceptó un cese al fuego de ese tenor con la mediación de Egipto hace varias semanas, ahora insiste en la eliminación de los túneles en Gaza que conducen hacia territorio israelí y el desarme de Hamás como medidas previas para detener su ofensiva.
Robert Sugarman el presidente de la Conferencia de Presidentes de las Organizaciones Judías de Estados Unidos, que dirigió el encuentro, marcó la pauta con su discurso de apertura a la multitud presente.
«Tenemos que seguir apoyando las decisiones del gobierno” de Israel, “cualquiera que sea nuestro punto de vista personal», dijo Sugarman, para añadir que “debemos seguir instando el apoyo de nuestro gobierno” a las decisiones de Tel Aviv.
La mayoría de los oradores no expresaron una oposición directa a la política de la administración de Obama, pero casi todos destacaron la necesidad del desarme de Hamás y de que el gobierno israelí de Benjamín Netanyahu debe contar con el apoyo incondicional de Washington.
John Boehner, el presidente de la Cámara de Representantes y uno de los principales opositores políticos de Obama, se aproximó más a expresar una crítica directa al presidente cuando vinculó la crisis en Gaza con Irán.
«Vamos a seguir presionando para que esta administración aborde la causa principal de los conflictos en Medio Oriente», señaló Boehner.
“Lo que vemos en Gaza es el resultado directo del terrorismo patrocinado por Irán en la región. Esto es parte de la extensa historia iraní de suministro de armas a las organizaciones terroristas con sede en Gaza, que debe llegar a su fin. Los enemigos de Israel son nuestros enemigos. Esta será nuestra causa mientras yo sea presidente” de la Cámara de Representantes, afirmó.
Muchos de los oradores mencionaron que Irán patrocina a Hamás, aunque la relación entre ambos se fracturó cuando el movimiento palestino declaró su apoyo a las fuerzas insurgentes en Siria que luchan contra el presidente Bashar al Assad, el aliado clave de Teherán en la región.
Sin embargo, a muchos de los presentadores la conexión les brindó una vía para vincular el combate en Gaza con el escepticismo del Congreso ante la diplomacia con Irán por el problema del programa nuclear iraní.
Pero las tensiones entre el gobierno de Obama y el de Netanyahu no faltaron a la cita en el evento de Washington.
El embajador de Israel ante la Organización de las Naciones Unidas, Ron Dermer, ofreció un tono conciliador para equilibrar la determinación de Tel Aviv de continuar con sus operaciones en Gaza a pesar de que Estados Unidos y la mayor parte de la comunidad internacional piden el alto al fuego inmediato e incondicional.
Según Dermer, su país «descubrió decenas de túneles cuya única finalidad es la de facilitar los ataques contra civiles israelíes. Israel continuará destruyendo estos túneles y estoy seguro de que la administración de Obama lo entiende”.
«Todo el mundo entiende que el dejar estos túneles sería como incautar 10.000 misiles y devolvérselos a Hamás… No vamos a parar hasta que se haga ese trabajo. Israel cree que una solución sostenible es aquella que tenga la desmilitarización de Gaza, la remoción de los cohetes y la destrucción de los túneles para que Hamás no pueda rearmarse en un año o dos. Agradecemos el apoyo de todos los líderes de Estados Unidos”, declaró.
Dermer también ofreció un mensaje de conciliación moderada tras las fuertes críticas en Israel contra el secretario de Estado, John Kerry, después de que el supuesto texto de una propuesta de alto al fuego del funcionario estadounidense se filtrara a los medios de comunicación israelíes.
«Ahora les hablo en nombre de mi primer ministro», declaró Dermer. “La críticas contra el secretario Kerry por sus esfuerzos de buena fe para avanzar en un cese del fuego no se justifican. Esperamos con interés trabajar con Estados Unidos para avanzar en un cese del fuego que sea duradero”, expresó.[related_articles]
Rice también se refirió a las críticas contra Kerry.
“Kerry, en representación de Estados Unidos, trabajó con Israel en cada momento para apoyar nuestros intereses comunes. En público y en privado, apoyamos con firmeza el derecho a la defensa de Israel. Vamos a seguir haciéndolo y a dejar las cosas en claro cuando alguien distorsione los hechos”, manifestó.
El día después del encuentro en Washington, el 29 de julio, se desató otra polémica en Israel cuando estaciones de radio israelíes informaron sobre una transcripción filtrada de una llamada telefónica entre Netanyahu y Obama.
El Canal 1 de Israel informó que Obama “se comportó de una manera grosera, condescendiente y hostil” hacia Netanyahu en la llamada telefónica.
Tanto la Casa Blanca como la oficina del primer ministro israelí negaron las versiones de prensa.
Editado por Kitty Stapp / Traducido por Álvaro Queiruga