El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, culpó a Irán de la colocación de sendas bombas dirigidas a diplomáticos de su país en India y Georgia. El régimen de la república islámica es «el mayor exportador mundial de terrorismo», sostuvo.
Netanyahu habló horas después de que un vehículo diplomático que trasladaba a la esposa de un agregado militar israelí fuera atacado este lunes 13 cerca del complejo residencial del primer ministro de India, Manmohan Singh, en una de las zonas más seguras de Nueva Delhi. La mujer, el conductor y una tercera persona sufrieron heridas.
Otra bomba fue hallada en un automóvil de la legación diplomática de Israel en Tiflis, capital de la república de Georgia, en la región del Cáucaso. El artefacto fue descubierto por un empleado local y desactivado por la policía.
Netanyahu acusó a Teherán y a la organización política y paramilitar libanesa y proiraní Hezbolá (Partido de Dios) de conducir una campaña de violencia contra su país. Hemos visto en los últimos meses varios intentos de atacar a ciudadanos israelíes y judíos en varios países, como Azerbaiyán y Tailandia, entre otros».
El gobernante prometió conducir una «dura, sistemática, pero paciente» acción contra Irán.
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Mientras, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Avigdor Lieberman, dijo a periodistas en Jerusalén que «sabemos exactamente quién es responsable de estos ataques y quién los planificó. No los vamos a tolerar».
El reportero Cal Perry, de Al Jazeera, dijo desde Jerusalén que los ataques fueron «casi simultáneos. Esto da crédito a quienes señalan a una organización mayor, quizás a un país como Irán, quizás Hezbolá«, dijo Perry.
Irán rechazó las acusaciones como «puras mentiras», indicó la agencia oficial de noticias IRNA, citando al embajador de ese país en India, Mehdi Nabizadeh.
«Todo ataque terrorista es condenado (por Irán) y rechazamos con firmeza los comentarios falsos de un funcionario israelí», dijo Nabizadeh.
«Estas acusaciones son falsas y puras mentiras, como en ocasiones anteriores».
Desde Nueva Delhi, la corresponsal Prerna Suri, de Al Jazeera, sostuvo que el vehículo atacado estaba estacionado cerca de la embajada israelí en una zona de alta seguridad y a un kilómetro de distancia de la residencia del primer ministro.
«Algunos testigos describieron cómo el auto explotaba y se incendiaba. Una parte quedó completamente carbonizada. El capó se abrió y estalló en llamas», describió.
«Otros testigos mencionaron a dos personas en motocicletas que arrojaban algún tipo de artefacto (hacia el automóvil). La policía intenta determinar qué tipo de explosivo era. Los equipos forenses y el personal de la embajada israelí están en la escena del hecho, intentando averiguar lo que pasó», afirmó Suri.
Shota Uitashvili, portavoz del Ministerio del Interior de Georgia, dijo que el vehículo de Tiflis se encontraba en un estacionamiento a unos 200 metros de la embajada, donde lo había dejado su conductor en la mañana, al llegar desde su casa.
Las legaciones diplomáticas de Israel ya se encontraban en alerta ante posibles ataques. «Hace casi exactamente cuatro años, el 12 de febrero de 2008, fue asesinado el jefe militar de Hezbolá, Imad Mughniyah. Y esa organización había advertido que vengaría su muerte, y había acusado a Israel«, abundó Perry.
«Cada 12 (de febrero) todas las embajadas entran en estado de alerta como medida de seguridad. Pero esta es la primera vez que vemos ataques simultáneos en territorios extranjeros, algo que Hezbolá también había advertido que haría».
* Publicado en acuerdo con Al Jazeera.