En un país como Botswana, donde la pena de muerte es defendida por el gobierno y tiene gran apoyo de la población, el abogado y dirigente político Duma Boko tiene el coraje y la voluntad de oponerse defendiendo la vida de su cliente en la audiencia que se celebrará este viernes 15.
"Me opongo a la pena de muerte por muchas razones", remarcó Boko. "Una de ellas es la irrevocabilidad de la sentencia. No la puedes revocar", insistió.
Boko, del opositor Frente Nacional de Botswana, apelará la condena a muerte de Brandon Sampson, procesado junto con el ciudadano sudafricano Michael Molefhe en 2007 por dos asesinatos. La ejecución de ambos está prevista para julio.
IPS conversó con el desatacado abogado de derechos humanos sobre el caso y las posibilidades de derogar el máximo castigo en Botswana.
IPS: ¿Qué pedirán Michael Molefhe y Brandon Sampson al tribunal este viernes?
DUMA BOKO: Le pedirán que anule la sentencia. Como sabes cada uno de ellos fue acusado por dos cargos de asesinato y condenados por cada uno.
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Represento a Brandon Sampson, quien sostiene que la condena es infundada y el tribunal se equivocó y cometió un grave error en su análisis y estudio de las pruebas. Sobre esa base, le pide al tribunal que anule la sentencia porque no se sostiene ni legalmente ni en los hechos.
IPS: ¿La ejecución de un asesino no hace sentir mejor a las familias de la persona asesinada?
DB: No sé si las hace sentir mejor. Nadie hizo un estudio aquí como para concluir eso. Lo que sí creo es que le resta valor a la vida.
La sociedad que celebra la muerte causada por el Estado es inmadura. Si creemos que nuestro pueblo es inmaduro tenemos que educarlo o probar que en realidad lo es, pues puedes darte cuenta de que no es así.
El Estado es inmaduro y, el sistema legal, el que obliga a los jueces y al propio Estado a ser inmaduro.
IPS: A la luz de lo que ocurrió en 2005 con la absolución de Maauwe y Motsetlwa, cuyo juicio original fue anulado y el Estado demoró en exceso el reprocesamiento, ¿cuál es el problema con los abogados de oficio en los casos de pena de muerte?
DB: Sólo un abogado con experiencia puede agarrar esos casos porque no se paga nada y hay que tener pasión por defender los derechos humanos.
No todos los abogados tienen esa pasión ni se dedicarán con tanto compromiso y celo como requiere un caso de esa naturaleza. Tenemos que mejorar eso y que tengan más prestaciones.
Cuando el Estado hace juicio tiene todas las facilidades. La Constitución requiere que para conducir su defensa, el imputado tenga las mismas prestaciones.
Se puede decir que no hay igualdad de poderes cuando el abogado defensor no tiene los mismos recursos que el Estado. Se viola la Constitución, lo que vicia la imposición de la pena de muerte.
IPS:¿Qué perspectivas hay de abolir el máximo castigo en Botswana?
DB: No sé cuáles son las perspectivas. Pero sé que se necesitará un gobierno comprometido o una justicia muy implicada.
Esperemos contar con lo último, porque no lograremos nada del gobierno. Es muy populista y cree en la naturaleza de ese tipo de penas. Está encabezado por una persona que dudo que reflexione sobre las consecuencias jurídicas y filosóficas de algunos castigos y sobre su eficacia para disuadir el delito o lograr objetivos sociales.
Habrá que esperar por el Poder Judicial, que es competente para pronunciarse contra la pena capital.
IPS: Usted declaró que su partido defiende los derechos humanos en el país. Si llega a ser presidente, ¿impondría una moratoria o tratará de derogar la pena de muerte en Botswana?
DB: Por supuesto, cuando esté al frente del gobierno no firmaré la orden de matar a nadie, lo diga la ley o no.
No pido disculpas por mi posición porque es una cuestión de principios.