Espectáculos gratuitos de cine, música, teatro y humor, entre otros, intentan animar a las personas afectadas por el terremoto y el tsunami del 27 de febrero en el centro y sur de Chile.
"La gente lo está pasando muy mal", resumió a IPS Jorge Brito, director en Talca de la Pastoral Social Caritas Chile, una organización de la Iglesia Católica que ha liderado la entrega de ayuda a los miles de damnificados del sismo magnitud 8,8 en la escala de Richter que azotó a este país.
Talca, la capital de la región de El Maule ubicada a 250 kilómetros de Santiago, fue una de las ciudades más afectadas por esta tragedia sin parangón en la historia del país, por la extensión del territorio dañado, que dejó 486 personas muertas y casi 80 desaparecidas.
Aunque la ayuda de emergencia ha ido llegado paulatinamente, se trata sólo de un "momento de transición", porque muchas familias "deben partir de la nada", con el frío y la lluvia como telón de fondo, lo cual genera mucha angustia, comentó Brito.
Por ello, Caritas apoyó desde fines de marzo la llamada "Caravana del Humor", protagonizada por una treintena de humoristas nacionales, como Juan Carlos "Palta" Meléndez, Natalia Cuevas y Ronco Retes, quienes hicieron reír a cientos de personas en localidades de El Maule como Curepto, Curicó, Licantén y Talca.
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"Fue un espacio para liberar tensiones. La gente se rió a carcajadas", contó Brito. En junio, Caritas pretende realizar un encuentro deportivo en la misma zona.
Detrás de las múltiples iniciativas culturales surgidas tras la catástrofe están el gobierno, las Fuerzas Armadas, organizaciones no gubernamentales, instituciones religiosas, empresas privadas, universidades, artistas, estudiantes, deportistas, personalidades y anónimos voluntarios.
El Ministerio de Educación y la Fundación CorpArtes comenzaron el 10 de este mes el programa "Chile anima a Chile", que busca entretener a 24.000 personas hasta el 9 de mayo a través de la exhibición de películas en tres dimensiones.
Un moderno camión equipado con 40 butacas y un generador de energía recorrerá 30 ciudades desde Curicó, 200 kilómetros al sur de Santiago, hasta Los Ángeles, en la región del Bío-Bío y a 513 kilómetros de Santiago.
Los espectáculos circenses también han sacado sonrisas en medio de esta catástrofe que le costará al país unos 30.000 millones de dólares, según el Ministerio de Hacienda.
Hasta ahora han actuado gratuitamente la agrupación internacional Payasos Sin Fronteras y los grupos chilenos El Circo del Mundo, La Bandita Alegre y el Teatro Museo del Títere y el Payaso.
El Foro Chileno por los Derechos de la Infancia, integrado por seis organizaciones no gubernamentales como Corporación Opción, Hogar de Cristo y Aldeas Infantiles SOS, también ha organizado funciones de títeres para niños y niñas, considerando que todavía 120.000 de ellos permanecen sin clases por la destrucción de sus escuelas.
Cuatro empresas de televisión para abonados por cable y satélite se unieron con el gobierno para divertir a 30.000 niños y adolescentes en ciudades como Constitución, Dichato, Iloca, Navidad, Pichilemu, Talcahuano, Tomé y Vichuquén, en las regiones de O'Higgins, El Maule y Bío-Bío.
Las firmas Telmex, Movistar, DirecTV y VTR llevaron a cabo la iniciativa "Sonríe Chile: La Ruta de la Alegría", que desplegó carpas itinerantes para exhibir películas infantiles y desarrollar concursos y juegos con la animación de populares personajes televisivos.
Asimismo, las bandas instrumentales del Ejército y de Carabineros (policía uniformada) se han distribuido por el territorio para brindar piezas musicales a las familias que viven de la ayuda del gobierno y de la solidaridad de los vecinos menos afectados.
Artistas nacionales, como el cantante Fernando Ubiergo, y el Ballet Folclórico Nacional, también han recorrido las zonas del desastre. Otros 15 cantantes y bandas locales, como Nicole, Sinergia y Kudai, grabaron la canción "Yo voy contigo", para dar esperanza a los damnificados y donar sus derechos de autor.
El Centro Cultural Pablo Neruda y la Federación de Estudiantes de la Universidad Austral de Chile, con sede en la sureña ciudad de Valdivia, implementaron el "Bus de la alegría", llevando música y juguetes a los niños y niñas de Coliumo y Dichato, pueblos arrasados por el maremoto.
El 9 de este mes, el gobierno del derechista presidente Sebastián Piñera, que asumió el 11 de marzo, hizo un balance de la ayuda entregada hasta esa fecha.
Las autoridades informaron de 11.000 viviendas de emergencia instaladas, con la meta de llegar a 40.000 el 11 de junio, y 14.000 tiendas de campaña distribuidas.
El gobierno de Piñera también puso en marcha el programa "Manos a la Obra", con 8.000 millones de pesos (unos 15,5 millones de dólares) para la compra de materiales de reconstrucción para los habitantes de las 239 comunas golpeadas por la catástrofe.
"Hay que levantar el espíritu, la gente necesita sentirse acompañada, escuchada, porque la magnitud del problema supera cualquier esfuerzo", dijo Brito, quien llamó a mantener los espectáculos culturales en las ciudades destruidas.
