INFANCIA-INDIA: En emergencia

En India se celebra este sábado el Día del Niño, pero no hay nada para festejar: el acelerado crecimiento económico y el gran peso geopolítico alcanzado por este país no han podido mejorar la situación de la infancia, que constituye 30 por ciento de sus 1.200 millones de habitantes.

Unos 6.000 niños y niñas mueren en este país todos los días, y es sorprendente que 3.000 de ellos pierdan la vida por desnutrición, una "vergüenza nacional", según declaró el primer ministro Manmohan Singh.

India también concentra un tercio de los matrimonios precoces, según un estudio del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), "Progress for Children: A Report Card on Child Protection" ("Progreso para la infancia: un balance sobre la protección de la niñez"), divulgado en octubre.

La mortalidad infantil, que se ubica en 53 fallecidos cada 1.000 nacidos vivos, está muy por encima del máximo de 30 que debe alcanzar antes de 2015 para cumplir los Objetivos de Desarrollo de las Naciones Unidas para el Milenio (ODM).

Además, 53 por ciento de los menores sufren abusos sexuales.
[related_articles]
Del 13 por ciento de los niños y niñas trabajadores de Asia meridional, más de la mitad viven en India. Treinta y tres por ciento de los menores consumen alcohol u otras substancias prohibidas en este país, y medio millón se vuelven adictos cada año.

"La patética situación de la salud infantil en India refleja el fracaso total de su democracia, de sus instituciones públicas y de la sociedad civil", sostuvo Praveen Nair, presidente de Salaam Balak Trust, dedicada a atender niños en situación de calle.

Respetar los derechos de niños y niñas es un requisito para dotarlos de un ambiente favorable para su realización, dijo Nair a IPS.

Con 47 por ciento de niñas y niños desnutridos, India encabeza la lista de países con mayor incidencia de la enfermedad, detrás de Bangladesh, según el Banco Mundial. Además tiene una alta prevalencia de menores con bajo peso, casi el doble de África subsahariana.

Alrededor de 2,1 millones de niños y niñas mueren todos los años antes de cumplir cinco, es decir cuatro por minuto, según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas, la mayoría por enfermedades prevenibles, como diarrea, tifoidea, paludismo, sarampión y neumonía.

India no ha logrado superar la lamentable situación, pese a la enorme cantidad de programas destinados a la niñez.

El Programa Integral de Desarrollo Infantil, lanzado en 1975, ofrece varios servicios a más de 34 millones de niños y niñas de cero a seis años y siete millones de embarazadas y madres lactantes.

El gobierno tiene muchos programas de atención a la infancia, pero la impenetrable burocracia y la corrupción los corroe, se lamentó Ashok Sharma, director de proyecto del Programa de Patrocinio y Ayuda Comunitaria.

"Primero tenemos que ser más transparentes como sociedad para que esas medidas tengan éxito", indicó el primer ministro.

El intento del gobierno de lograr la escolarización de menores de seis a 14 años tuvo resultados variados. La matrícula general aumentó, pero las niñas y los sectores más pobres no se benefician.

El programa estatal Sarva Shiksha Abhiyan (movimiento educación para todos), lanzado en 2001 para lograr la educación universal, está a punto de lograr su meta con 96,5 por ciento del grupo objetivo escolarizado en todo el país, según una encuesta realizada el año pasado por el Ministerio de Desarrollo de Recursos Humanos.

Las inscripciones aumentaron de 131 millones en el periodo 2001-2002 a 182 millones en 2004-2005. La cantidad de niños y niñas no escolarizados se desplomó de 32 millones, cuando comenzó el programa, a 7,1 millones en 2005-2006, una caída de 78 por ciento.

Pero el programa no fue tan efectivo en los sectores sociales más necesitados, según datos recabados en varios estados. La matrícula de las niñas aumentó sólo 0,62 puntos porcentuales, de 46,43, en 2003, a 47,05 por ciento, en 2007. En los sectores más marginados, la inscripción cayó de 32,9 por ciento a 31,84 por ciento.

Otro problema generalizado en India es el trabajo infantil. "Ningún menor de 14 años debe trabajar en fábricas ni minas ni tener un empleo peligroso", reza el artículo 24 de la Constitución.

La Ley contra el Trabajo Infantil, de 1986, "prohíbe emplear a menores que no hayan cumplido los 14 años en procesos y ocupaciones peligrosas". Pero en muchas partes del país hay pequeñas manos trabajando en fábricas de fuegos artificiales, de vidrio, alfombras, vestimenta, entre otras.

El alza alarmante de la cantidad de menores empleados en 1976 obligó al gobierno a impulsar la Ley Bandhua Mazdoor Roko, contra el trabajo en depósitos, que prevé sanciones para los padres que vendan o manden sus hijos a trabajar.

En India, todo se diluye en los dos añejos problemas que padece el país: la descomunal población y el analfabetismo, señaló Sharma, del Programa de Promoción y Asistencia Comunitaria. "Los pobres son más vulnerables a elementos inescrupulosos. Son explotados por corruptos por falta de educación y de conciencia" de la situación, explicó.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe