Los gobiernos africanos negocian «a ciegas» acuerdos de asociación económica (EPA) para liberar el comercio, sin esforzarse por informar a la población sobre lo que discuten, señalaron expertos en una conferencia en la capital de Zimbabwe.
"Los políticos deben saber que actúan en representación de los ciudadanos y no de sí mismos", dijo a IPS Rangarirai Machemedze, director del Instituto de Información y Negociaciones Comerciales de África Meridional y Oriental.
"Debemos informar a la gente sobre lo que sus gobiernos negocian para ellos", agregó en un foro sobre el estado de la economía y las alternativas sustentables, organizado la semana pasada por la no gubernamental Coalición sobre la Deuda y Desarrollo de Zimbabwe (Zimcodd, por sus siglas en inglés).
"Esta reunión busca, básicamente, dar a los participantes un claro panorama sobre cómo opera la economía de un país en el contexto global. Queremos ayudarlos a entender el mercado internacional", señaló a IPS el director de la Zimcodd, Dakarayi Matanga.
Una entre millones que necesitan información es Sarah Mwandiyambira, quien trafica mercancías a través de la frontera de Zimbabwe para ganarse la vida.
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Aunque había escuchado hablar de los EPA, destinados a liberar el comercio entre los países africanos y la Unión Europea (UE), nunca le habían explicado en qué consistían exactamente.
Finalmente, lo supo. "Esto da miedo. Hay que hacer algo para detener los EPA. Soy una mujer sola que sobrevive con el comercio fronterizo para enviar a mis hijos a la escuela", afirmó.
Los EPA han sido criticados por abrir demasiado rápido los mercados africanos a las importaciones de la UE, destruyendo la producción agrícola e industrial local.
También se han criticado sus cláusulas para la liberación del sector de servicios y la exigencia de igual tratamiento por parte de los gobiernos a las compañías nacionales y extranjeras.
"No puedo creer que esto es lo que están negociando nuestros gobiernos para nosotros", dijo Mwandiyambira.
"Creo que si todos los zimbabwenses fueran informados sobre los EPA los rechazarían. Nos quitarán nuestros medios económicos. Se trata de un tema muy serio que, como africanos, estamos tomando a la ligera", agregó.
Otro participante, Sekai Saungweme, consultor en Harare, se mostró indignado. "Es un escenario muy triste. ¿En qué estaba pensando el gobierno cuando los firmaron? ¿Por qué lo hizo?", se preguntó.
Los EPA han sido suscriptos provisionalmente, y aún deben ser afinados antes de la firma final.
Machemedze insistió en que los gobiernos africanos no están haciendo lo que deben. También culpó a la UE por usar maniobras de división y emplear la táctica del garrote y la zanahoria en las negociaciones comerciales.
"Es un problema colonial. Las naciones poderosas buscan dividir para reinar. Si un país africano busca financiamiento para construir una represa le dicen que para obtenerlo debe firmar los EPA", agregó.
Machemedze, quien asistió a negociaciones comerciales durante los últimos cuatro años, dijo que "las reuniones a medianoche son algo común en esos encuentros. Los representantes africanos reciben visitas en las habitaciones de los hoteles y les prometen toda clase de ayuda".
A su juicio, Zimbabwe "debe desligarse del comercio internacional. La gente dirá que nos encontramos en una aldea global, pero ¿cuál ha sido el beneficio para África? Tenemos que construir nuestro mercado doméstico primero y luego el comercio en una escala que podamos sostener".
Los países africanos deben fortalecer sus mercados domésticos y luego establecer vínculos comerciales con gigantes económicos emergentes, como Brasil e India, sugirió Machemedze. "Al menos podrán identificarse con ellos y aprender de esos países", concluyó.