POLÍTICA: Comercio de armas alimenta la pobreza

Cada año, los ejércitos del mundo gastan 1,3 billones de dólares en armas, y países en conflicto son frecuentemente inundados con parte de este arsenal, que luego es usado contra civiles indefensos, denunciaron activistas por los derechos humanos.

"Si una nación puede verse envuelta en una guerra es injustificable venderle armas. Tienen que haber regulaciones o control, especialmente cuando los países que las compran están envueltos en un conflicto", dijo a IPS Valentino Deng, sobreviviente de la guerra civil sudanesa.

Las experiencias de Deng como refugiado inspiraron la última novela del escritor Dave Eggers, "What is the What" ("Qué es el qué").

Cuando su aldea fue atacada y quemada, Deng quedó separado de su familia y huyó a pie, con un grupo de jóvenes, hacia un campamento de refugiados en Kenia.

"Vi cómo morían personas por bombardeos desde el aire y aldeas totalmente destruidas por el fuego. Una mujer fue asesinada y su bebé trataba de amamantarse de su madre muerta. En esos momentos me preguntaba quién estaba proveyendo esas armas para la guerra", señaló Deng.
[related_articles]
Patrick Cammaert, ex comandante de la misión de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en República Democrática de Congo, fue testigo de la inutilidad del desarme de las facciones si al mismo tiempo no se controla la oferta de armas.

"Se tiene la sensación de que se está secando el piso mientras el agua sigue corriendo de una canilla abierta. En un momento se desarma a un grupo y a la semana siguiente tiene nuevas armas y municiones", dijo el militar.

Un informe de la organización humanitaria Oxfam revela que el comercio de armas, que consume los recursos de algunos gobiernos y fomenta los conflictos, conspira contra los avances hacia los Objetivos de Desarrollo de la ONU para el Milenio, adoptados en 2000 por la Asamblea General del foro mundial y que deberían alcanzarse en 2015.

"Es claro que si se quieren lograr esas metas de desarrollo, con reducción de la pobreza, mejor salud y educación, hay que controlar las ventas de armas", dijo Katherine Nightingale, autora del estudio de Oxfam.

Por lo menos 22 de los 34 países con menos posibilidades de lograr los objetivos se encuentran en conflicto o están saliendo de uno, según datos de la ONU. De acuerdo con Oxfam, entre 1990 y 2005, 23 naciones africanas perdieron en conjunto 284.000 millones de dólares como consecuencia de conflictos armados, alimentados por las transferencias de armas y municiones.

Asimismo, el comercio internacional de armas está considerado por la organización Transparencia Internacional una de las actividades más corruptas del mundo.

El mes pasado, un estudio de Amnistía Internacional reveló que proveedores clandestinos de armamento, con fondos de los gobiernos de Estados Unidos e Iraq, inundaron ese país de Medio Oriente con más de un millón de armas desde la invasión estadounidense en 2003. Muchas terminaron en manos de grupos insurgentes.

"La industria del comercio de armas es global. Queremos un tratado internacional que asegure que los Estados rindan cuentas por los procesos empleados para su adquisición", dijo Nightingale a IPS.

En diciembre de 2006, 153 Estados votaron en la Asamblea General de la ONU a favor de un tratado internacional sobre la venta de armas. Este mes habrá una nueva reunión para considerar nuevos pasos hacia ese objetivo.

Activistas denunciaron que China, Egipto, Estados Unidos, India, Pakistán y Rusia han intentado bloquear y posponer las negociaciones sobre el tratado acerca de la venta de armas.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe