Los precios del crudo retrocedieron esta semana casi 20 dólares por barril de 159 litros, pero los analistas se rehúsan a anticipar si podría consolidarse la tendencia o, menos aún, si podría comenzar a desinflarse la «burbuja petrolera» que creció desmesuradamente en el último año.
En Nueva York, donde hace una semana el petróleo pasó de 147 dólares por barril, el West Texas Intermediate (WTI, crudo dulce ligero), marcador estadounidense, se cotizó al cierre de este viernes a 128,50 dólares.
En Londres, el Brent del Mar del Norte, crudo de referencia para Europa, cerró a 129,66 dólares por barril.
"Una semana no marca una tendencia", advirtieron analistas como Tom Kloza, de la firma estadounidense Oil Price Information Service. "Todavía es muy temprano para poder afirmar que ya ha pasado lo peor", aseveró.
"Lo que sí es cierto es que los pronósticos de Wall Street —el distrito financiero de Nueva York— lucen mucho más importantes que lo que diga o haga la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) como regulador del mercado", advirtió a IPS el experto petrolero venezolano Elie Habalián.
Haciendo a un lado fundamentos clásicos del mercado, como la oferta y la demanda, más los factores geográficos y políticos que tradicionalmente inciden en los precios, los capitales especulativos que se abalanzaron sobre los contratos de petróleo y otras materias primas inflaron los precios sobre todo en el último año.
En 12 meses, los precios del barril pasaron de un promedio de 70 a otro de 140 dólares.
Sin embargo, en junio y en lo que va de julio la tensión en torno del desarrollo iraní de energía nuclear favoreció el nerviosismo de los mercados y posibilitó la estampida de precios, desde menos de 130 dólares por barril a más de 140.
"La atmósfera de inminente confrontación empujó los precios durante semanas, y por eso un factor clave para entender la disminución al llegar el fin de semana es la renovada negociación con Irán", opinó Olivier Jakob, de la consultora suiza Petromatrix.
La secretaria de Estado (canciller) de Estados Unidos, Condoleezza Rice, anunció que enviará a uno de sus adjuntos, William Burns, a una reunión en Ginebra con el responsable de política exterior en la Unión Europea, Javier Solana, y el negociador iraní Said Jalili.
Las negociaciones versan sobre la exigencia de las potencias occidentales a Irán de que interrumpa el supuesto desarrollo militar de su programa nuclear. Junto con las negociaciones, se han lanzado sobre Teherán advertencias de uso de la fuerza que, si Irán responde vigorosamente, encenderían la región del Medio Oriente.
Aún si no ocurre una conflagración regional, la sola interrupción del suministro petrolero iraní puede alterar el mercado. Irán produce más de cuatro millones de barriles diarios y ese eventual faltante no puede ser subsanado por otro productor, pues el único con una capacidad cerrada importante es Arabia Saudita, y no pasa de dos millones de unidades.
Otros expertos, como Luis Giusti, ex presidente del grupo estatal Petróleos de Venezuela, consideran que en la baja de los precios de la última semana se refleja la crisis económica estadounidense.
"La realidad de la desaceleración económica está allí presente y está haciendo que de alguna manera en los Estados Unidos se esté empezando a sentir la contracción de la demanda petrolera", sostuvo Giusti.
La demanda de crudo en Estados Unidos durante el primer semestre de este año bajó tres por ciento, 630.000 barriles por día, el declive más grande en 17 años. El consumo promedió durante el período fue de 20,08 millones de unidades, el nivel más bajo desde 2003, según el Instituto Americano del Petróleo.
"La volatilidad continúa imperando en el mercado petrolero", señaló un informe del Ministerio de Energía de Venezuela. "Los factores determinantes de los precios son la actividad especulativa de los mercados a futuro, el desenvolvimiento de la economía estadounidense y las tensiones geopolíticas en importantes regiones productoras".
Durante la última semana, el barril de petróleo WTI promedió los 138,58 dólares, el del Brent 138,88 y la cesta de 13 crudos de la OPEP 136,36 dólares.
La OPEP está integrada por Angola, Arabia Saudita, Argelia, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela. Producen unos 32 millones de barriles diarios, aproximadamente 37 por ciento de la demanda mundial y más de 60 por ciento del crudo que se exporta en el mundo.