SRI LANKA: Otra oportunidad para los niños que trabajan

El srilankés Sujit tiene 22 años y aspira a graduarse en 2010 como electricista profesional. Cuando se le dio la oportunidad de estudiar su vida cambió radicalmente.

Sujit, quien usa sólo su nombre de pila, es un claro ejemplo de éxito para los expertos, funcionarios del gobierno y activistas en Sri Lanka que aunaron esfuerzos para celebrar el Día Mundial contra el Trabajo Infantil este jueves.

La conmemoración fue creada en 2002 por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para concentrar la atención en acciones para eliminar el trabajo infantil.

El muchacho que hace no mucho vendía pescado y transportaba paquetes de un pequeño almacén para mantenerse a sí mismo y a su tía, ahora está en el umbral de una nueva vida gracias a las oportunidades que le abrió una organización no gubernamental financiada por una iglesia.

"Me gustaría trabajar en el exterior para poder capacitarme y cuidar a mi tía", explicó con felicidad.
[related_articles]
Sujit se encuentra entre unos 200 jóvenes capacitados en electricidad, soldadura y otros oficios por el Diyagala Boys Town Projects, una de tres instituciones creadas por sacerdotes cristianos.

La mira está puesta en una educación alternativa para niños que no van a la escuela debido a la pobreza.

"En vez de insistir en enviarlos a la escuela, donde tienen que empezar de cero para educarse, nuestro proyecto aspira a la capacitación laboral", dijo el sacerdote Rajapakse, quien administra el proyecto.

En efecto, casi 90 por ciento de los graduados pueden hallar empleo como electricistas o soldadores en empresas.

El énfasis en proporcionar una educación formal que abra oportunidades laborales cuenta con la bendición de los padres o tutores de los niños de familia pobre, que no tuvieron reparos en enviar a sus hijos a trabajar para llevar al hogar un ingreso extra.

La OIT calcula que en todo el mundo trabajan 165 millones de niños y niñas de entre cinco y 14 años, entre ellos 74 millones en ocupaciones peligrosas.

Setenta y dos millones de niños en edad de cursar la escuela primaria no lo hacen. Las niñas tienen aún menos probabilidades, según informes internacionales señala.

Sri Lanka, donde la escuela es obligatoria hasta los 14 años, tiene logros encomiables en aspectos educativos como el enrolamiento escolar, la alfabetización y la igualdad de género.

Pero el país afronta graves desafíos.

Angela Wijesinghe, secretaria del Sindicato de Maestros, dijo que Sri Lanka —donde el costo de vida es elevado y la inflación ronda 25 por ciento— debe estar vigilante.

"Con una creciente pobreza, el trabajo infantil en Sri Lanka se vuelve rápidamente una opción de supervivencia para muchas familias rurales", dijo Wijesinghe. El gobierno ya cerró 644 escuelas públicas con menos de 150 estudiantes en toda la isla para reducir costos, sostuvo la educadora.

Varios factores caracterizan al trabajo infantil en Sri Lanka. Hiranthi Wijesinghe, ex directora de la Unidad de Protección a la Infancia, dijo que el problema se mantiene oculto.

"A diferencia de la mayoría de los otros países sudasiáticos donde los niños son empleados en industrias visibles como la fabricación de alfombras, en Sri Lanka los desafíos son otros", dijo.

Según la Encuesta de Actividad Infantil realizada en 1999 por el Departamento de Censos y Estadísticas, 21 por ciento de los niños son empleados en alguna clase de actividad económica, entre ellas los trabajos domésticos.

Los menores se desempeñan en la industria de la construcción, como empleados domésticos, campesinos sin paga o mendigos.

De 50 por ciento de los niños trabajadores que no iban a la escuela o a una institución educativa, 66 por ciento eran niños y 34 por ciento niñas.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe