La Alianza de Civilizaciones dio un importante paso adelante al inaugurarse este martes en la capital española su primer foro, aunque no se cumplieron las expectativas creadas acerca de la asistencia de gobernantes.
El acto inaugural fue presidido por el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, el Alto Representante de las Naciones Unidas para la Alianza de Civilizaciones, el portugués Jorge Sampaio, el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el jefe del gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero.
La Alianza, orientada a afirmar la paz y un desarrollo justo y equitativo en el mundo, es una idea de Zapatero quien, después de dialogar con Erdogan, la presentó junto con éste en 2004 en la ONU, que un año después la adoptó como un programa suyo y designó como Alto Representante a Sampaio, presidente de Portugal de 1996 a 2006.
Este proceso nace en 1997 de la mano del entonces presidente iraní Mohamed Jatami (1997-2005), quien propuso establecer un diálogo entre civilizaciones en su discurso inaugural de la Asamblea General de la ONU.
Aunque todos los mandatarios del mundo fueron invitados, solamente asisten al encuentro de dos días los primeros ministros Erdogan, Abdullah Ahmad Badawi, de Malasia, Danilo Türk, de Eslovenia, Abdelaziz Belkhadem, de Argelia, y los presidentes Tarja Halonen, de Finlandia, y Abdoulaye Wade, de Senegal.
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En total asisten más de 400 representantes de 80 países y de grandes religiones, entre ellas las iglesias cristianas Católica, Ortodoxa Etíope, Ortodoxa Rusa y protestantes, los musulmanes, budistas, sintoísta, hindúes.
En la primera jornada de intervenciones y debates ya se perfilaron dos proyectos que se aprobarán antes de la conclusión del foro este miércoles y que definen los objetivos del mismo y sus actividades más inmediatas.
El primer proyecto es el llamado Mecanismo de Acción Rápida en los Medios de Comunicación, en el cual expertos en cuestiones interculturales abrirán un análisis y debate en Internet, en especial si se producen crisis internacionales y cuyos resultados entregarán a los órganos directivos y consultores de la Alianza de Civilizaciones (ADC).
El segundo es el Centro de Información de la ADC, concebido como un instrumento educativo sobre múltiples cuestiones destinado a mejorar el entendimiento transcultural y que estará abierto al público vía Internet.
En el acto inaugural, Zapatero anunció la puesta en marcha en su país de un Plan Nacional que prevé 60 actuaciones "de corto, medio y largo plazo" dirigidas a la juventud y a los medios de comunicación y que pondrá un especial énfasis en la educación intercultural y las migraciones.
Añadió que para hacer efectiva la ADC, los países que la suscriben deberán darle un contenido práctico y concreto, favoreciendo el conocimiento mutuo y la diversidad, promoviendo los valores de una cultura de paz, mejorando la integración y capacitación de los inmigrantes y, desde luego, promoviendo la difusión de los objetivos de la Alianza.
El gobierno de Zapatero ya ha dado pasos en ese sentido. En el último Consejo de Ministros de esta legislatura, celebrado el viernes, se aprobó la creación de un cuerpo de voluntarios de la ACD, de un Premio Anual de la Capitalidad Intercultural y un programa de formación de arabistas españoles.
Otro paso importante lo anunció la reina Noor, viuda del rey Hussein de Jordania, quien presentó el Fondo para los Medios de Comunicación e informó de que el mismo ya cuenta con una financiación de 10 millones de dólares y comenzó la búsqueda de patrocinadores para lograr aportaciones que sumen otros 100 millones de dólares.
Es importante lograrlo, explicó, porque con el Fondo "se promoverán contenidos en los medios que alienten el entendimiento mutuo y el también mutuo respeto entre las sociedades y culturas de todo el mundo".
Por otro lado, el secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis, y Sampaio suscribieron este martes una carta de intenciones que es el primer paso para la firma de un acuerdo de cooperación entre la ADC y esa institución paneuropea.
Tomando como base los objetivos de la alianza, en su intervención en el acto inaugural Erdogan defendió el ingreso de su país a la Unión Europea y señaló que los obstáculos que se coloquen a ese ingreso, todavía en proceso, serían también "obstáculos para la paz y la estabilidad en el mundo".
Su país, aclaró, no espera tratos de favor, pero destacó que su ingreso a la UE "será un indicador claro de que la Alianza de Civilizaciones es posible y contribuirá a la paz internacional".
Hoy en día, subrayó, "en un mundo en el que el conocimiento y los valores sociales y culturales se globalizan, desgraciadamente el odio y la intolerancia también lo hacen".
Por eso considera indispensable fortalecer la ADC como "respuesta global a un problema global", respuesta que, a su entender, debe incluir la cooperación entre todos y la creación de una red de solidaridad.
Ban subrayó que desde la organización que dirige asumen la ADC como "una forma de enfrentarse al extremismo", a la que calificó como "plataforma única de encuentro entre culturas para hablar con franqueza de las preocupaciones interculturales".
El gobierno español designará un coordinador nacional para el desarrollo de sus acciones en la ADC.
Aunque no se informó sobre quien será, fuentes próximas al gobierno dijeron a IPS que lo más probable es que lo sea el diplomático Máximo Cajal, único sobreviviente de un incendio en la embajada española en Guatemala, en 1980, provocado por la intervención del ejército de ese país en busca de opositores en el marco de la lucha contrainsurgente de esa época.
Los participantes al Foro y otros invitados pudieron asistir al término de la primera jornada a un concierto con diferentes visiones artísticas, en el que escucharon a la violinista española Carla Marrero, de 12 años de edad, a la cantante marroquí Amina Aloui y el cantor español Miguel Poveda, premio nacional de música 2007, una de las voces más reconocidas del flamenco.
