Los pedidos de renuncia al presidente del Banco Mundial, el estadounidense Paul Wolfowitz, tienen ahora un alcance planetario, formulados por periódicos, funcionarios y decenas de miles de activistas e internautas de todo el globo.
Wolfowitz, décimo presidente del Banco desde junio de 2005, admitió haber ordenado un aumento de salario de 60.000 dólares anuales para su novia y subalterna, Shaha Riza, antes de transferirla en "misión externa" al Departamento de Estado (cancillería) estadounidense, como parte de un exorbitante paquete de compensaciones.
La controversia se complica aun más por la muy personal campaña contra la corrupción en los países en desarrollo que Wolfowitz pretende dirigir desde el Banco. Según los críticos de la institución con sede en Washington, su gestión pierde más y más credibilidad a medida que avanza el escándalo.
Las acusaciones de nepotismo no sólo le crean problemas al presidente del Banco, conocido por su papel como ideólogo máximo de la invasión a Iraq en 2003 desde la Subsecretaría (viceministerio) de Defensa de Estados Unidos. También tensan su ya conflictiva relación con los funcionarios de carrera del organismo internacional.
Algunos funcionarios parecen estar detrás de un nuevo sitio en la red mundial de computadoras internet, en http://www.wolfowitzresign.com, que recogió hasta ahora 38.000 adhesiones electrónicas al pedido de renuncia formulado en 12 idiomas, entre ellos inglés, español, francés y árabe.
Los propios administradores del sitio admiten desde sus páginas que reflejan la posición de los funcionarios, y advierten su deseo de exponer "el corrupto, no ético y prepotente comportamiento" de Wolfowitz "y su círculo íntimo", así como su "reinado de inmoralidad y corrupción".
"Si nuestro presidente no es capaz de actuar con transparencia y responsabilidad, ¿cómo se supone que los funcionarios debemos promover la gobernanza y la anticorrupción entre nuestros clientes?", agrega.
En Estados Unidos, influyentes columnistas y periódicos sumaron sus voces al pedido de renuncia. "Wolfowitz debería marcharse", sentenció en un editorial el diario The Los Angeles Times.
"Un presidente del Banco Mundial que le hace favores a su novia no puede decirle a otros líderes, de manera convincente, que luchen contra la corrupción", ironizó el periódico.
"Debería renunciar" es la frase final de un extenso informe de la revista semanal The New Republic.
"¿Qué diría el propio señor Wolfowitz si descubriera que un gobierno que recibe créditos del Banco Mundial dispusiera este tipo de beneficios a los amigos personales de su presidente?", se preguntó, retórico, el diario The New York Times.
"No hay manera de que el señor Wolfowitz recupere su credibilidad y continúe siendo eficaz en el Banco", advirtió el periódico neoyorquino.
Por su parte, The Brisbane Times, uno de los diarios más importantes de Australia, advirtió que Wolfowitz "se ha convertido en un obstáculo para el Banco Mundial". Otro periódico de ese país, Australian, consideró: "A Wolfowitz deberían mostrarle la puerta."
"Señor Wolfowitz, equilíbrese o dígale adiós al Banco Mundial", sostuvo el diario Daily Times, de Pakistán.
The Khaleej Times, de Emiratos Árabes Unidos, manifestó que el presidente del Banco Mundial no debería esperar por el resultado de la investigación afrontada por la Junta de Directores de la institución.
Y en Filipinas, Manila Times indicó: "Wolfowitz debe irse. (…) Perdió credibilidad como cruzado contra la corrupción. Perdió el respeto y el apoyo de los funcionarios del Banco. Perdió el respaldo de los principales accionistas del Banco, excepto Estados Unidos."
Activistas africanos cuestionaron a los ministros de Finanzas del continente por haber calificado a Wolfowitz de "visionario" en la reunión conjunta del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en Washington el fin de semana.
"No trate de usar a África de salvador", advirtió desde Nairobi el activista Njoki Njoroge Njehu, director ejecutivo del Centro Mundial de Recursos Hermanas de Mumbi. "Los políticos africanos no le hacen ningún favor al pueblo africano al excusar
Sindicatos internacionales, organizaciones de fomento al desarrollo y activistas se sumaron a los reclamos de renuncia.
El Congreso de Sindicatos de Sudáfrica declaró que "el señor Wolfowitz encarna lo peor de las instituciones financieras internacionales".
Mientras, la organización anticorrupción Transparencia Internacional no pidió la renuncia, pero se manifestó preocupada por la controversia y por el destino de la estrategia del Banco Mundial.
Pero otras organizaciones no gubernamentales europeas pidieron la remoción del funcionario.
"La reputación del Banco caerá aun más en picada si Wolfowitz sigue", dijo Nuria Molina, de la Red Europea sobre Deuda y Desarrollo con sede en Bruselas.
Este miércoles habrá una protesta frente al edificio del Banco en Washington. (FIN/IPS/traen-mj/em/wd na ip if dv md pn sp ik/07)