Techint, la compañía argentina que construyó en Perú la tubería de 557 kilómetros de gas líquido de Camisea, empleó a técnicos soldadores sin calificación, violando normas internacionales, afirma un nuevo informe de la consultora estadounidense independiente E-Tech International.
El reporte se difunde justamente cuando el gobierno peruano de Alan García, iniciado el 28 de julio, inicia conversaciones con Transportadora de Gas del Perú (TGP), para revisar el contrato con ese consorcio encargado de las operaciones del poliducto de gas natural y de gas líquido tendido entre el yacimiento amazónico de Camisea y la costa sobre el océano Pacífico.
Entre 2004 y 2006 se registraron cinco roturas en la tubería de gas líquido, lo que motivó fuertes críticas a TGP y obligó al anterior gobierno de Alejandro Toledo a ordenar una auditoría para determinar las condiciones de los gasoductos.
Durante la campaña electoral, García prometió que revisaría el contrato con TGP para introducir sanciones no previstas y obligar al consorcio a solucionar las causas de las frecuentes roturas que paralizaron el flujo de gas.
El director ejecutivo de E-Tech International, Bill Powers, autor del nuevo reporte técnico sobre la tubería de Camisea, dijo a IPS que a diferencia del anterior informe divulgado en febrero, que se sustentaba en testimonios de ex técnicos de TGP, el actual cuenta con documentos y fotografías que acreditan lo afirmado en ambos estudios: que en el proceso de construcción, se cometieron fallas que explican las reiteradas averías.
[related_articles]
Uno de los documentos más importantes es un "Reporte de No Conformidad" de un inspector de campo de la consultora Gulf Interstate Engineering (GIE), contratada por la constructora Techint.
En el reporte se consigna que luego de revisar 26 soldaduras o "juntas" seguidas en un tramo de 300 metros del kilómetro 92 de la tubería, el inspector constató que "se utilizaron soldadores no calificados en contravención de las normas estipuladas y previstas en el API 1104/99 (código internacional del American Petroleum Institute), en las especificaciones del proyecto (gasífero de Camisea) y en las Especificaciones de Procedimiento de los Soldadores de tuberías de gas y petróleo".
En el mismo documento aparece un espacio para que el contratista, en este caso Techint, asiente las medidas a tomar para remediar el problema. La constructora nunca completó ese formulario.
El reporte de E-Tech International comprende también fotografías que exponen otras graves deficiencias:
—Tuberías cubiertas apresurada y parcialmente con tierra, entre los kilómetros seis y 10.
—Tuberías expuestas por largo tiempo a la intemperie antes de ser introducidas en las zanjas, entre los kilómetros tres y seis.
—Tuberías hundidas en el agua y sometidas a la erosión, en el kilómetro 90.
Además, el informe inserta copias de documentos originales que consignan los cambios del trazado del tendido de los gasoductos sin evaluación previa.
Consultado por IPS, el ministro de Energía y Minas, Juan Valdivia Romero, dijo que pediría a la empresa que auditará los gasoductos de TGP —que será seleccionada mediante concurso internacional el 12 de septiembre—, evaluar las conclusiones de E-Tech.
"La empresa auditora deberá evaluar si las acusaciones son reales o hay dudas en sus planteamientos. Deberá considerar en su estudio todos los elementos consignados en el informe. Por otro lado, a la Dirección de Hidrocarburos del Ministerio y a la comisión que se encarga del caso Camisea, les he pedido un informe sobre los nuevos hallazgos", precisó el ministro.
Valdivia señaló además que, a la luz de la nueva información revelada por E-Tech International, el gobierno evalúa si los términos de referencia de la auditoría van a ser más rigurosos.
Respecto de las negociaciones con TGP para la revisión del contrato, el ministro informó a IPS que "no se está viendo el caso de la construcción del poliducto sino de lo que va a ocurrir de ahora en adelante cuando se produzca la interrupción del suministro de gas. Sólo después de los resultados de la auditoría que se va a contratar, se verán los temas que surjan del estudio".
El congresista del partido de gobierno José Carrasco Távara, quien ocupó el Ministerio de Energía y Minas en la primera administración de García (1985-1990) discrepó con Valdivia. El nuevo informe de E-Tech ratifica la necesidad de revisar el contrato con TGP y de frenar la búsqueda de la auditoría, dijo a IPS.
"Con los nuevos elementos revelados por la consultora (E-Tech), la auditoría que va a convocar el Estado para Camisea debe postergarse para incorporar los nuevos términos de referencia. Tiene que ser una auditoría integral, que incluya la solicitud de información a IGE, cuyos inspectores encontraron en las obras a soldadores no calificados", dijo el legislador que preside la Comisión de Energía y Minas del Congreso.
Dicha comisión convocará al ministro Valdivia para pedirle la consideración de los hallazgos de E-Tech en la auditoría que contratará el Estado.
IPS puso en conocimiento de TGP el contenido del segundo reporte de E-Tech para que hiciera comentarios.
"El nuevo informe (de E-Tech) descalifica y cuestiona no sólo a TGP sino a otras entidades que se han preocupado e investigado con seriedad las denuncias presentadas por el hecho de que sus conclusiones no coinciden", aseveró su gerente general, Ricardo Ferreiro.
"TGP ha sostenido y sostiene que sólo la ejecución de una auditoría técnica despejará todas las dudas que existen sobre el sistema de transporte de gas del Proyecto Camisea", dijo.
"Somos los primeros interesados y estamos a la espera de los resultados de la convocatoria que ha cursado el Estado para que ésta se inicie a la brevedad. Todos exigimos rigurosidad en este proceso y debemos colaborar con ello pues está en juego el proyecto energético más importante del país", añadió el gerente general de TGP.
La firma, el Ministerio y el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía (Osinerg) habían negado en febrero la afirmación del primer informe de E-Tech acerca del empleo de personal no calificado para trabajar en las soldaduras.
"Desacreditaron nuestro informe, pero nosotros continuamos investigando. El documento que obtuvimos es la prueba contundente de que no mentimos: sí se usaron soldadores sin calificación para el trabajo de la tubería de gas líquido, lo que está terminantemente prohibido en todo el mundo", dijo Powers a IPS.
"Techint dijo que todos los soldadores estaban debidamente calificados antes de recibir autorización para soldar en el proyecto", añadió Powers. "Si la constructora dice que estaban calificados, ¿entonces estamos hablando de que probablemente tenían falsos certificados de calificación técnica para las soldaduras? ¿A quiénes entregaron la construcción del gasoducto?", se preguntó.
El 4 de marzo, la comunidad indígena de Kepashiato, en la selva amazónica, sufrió las consecuencias de la explosión de la tubería de gas líquido. Se incineraron varias casas y dos personas resultaron quemadas.
El entonces primer ministro Pedro Pablo Kuczsynski atribuyó de inmediato el incidente a una acción terrorista y lo vinculó a la presentación del primer informe de E-Tech, cuyo texto advertía de posibles nuevos accidentes.
Kuczsynski, quien entre diciembre de 2002 y febrero de 2004 integró el directorio de Tenaris, una empresa subsidiaria de Techint, decidió en segunda instancia ordenar una revisión independiente de la tubería de Camisea. Pero cinco meses después, la primera convocatoria fracasó y hasta ahora no se ha designado a la compañía que efectuará la investigación.
En junio, una comisión investigadora del Congreso sobre Camisea concluyó que existieron irregularidades en la construcción y recomendó que se evaluara la calidad de la tubería. Ese informe se encuentra en trámite para su aprobación por la nueva legislatura.
El presidente de Osinerg, Alfredo Dammert, cuya tarea es fiscalizar las operaciones de TGP, dijo a IPS que el empleo de soldadores no calificados probablemente fue una anomalía registrada en la primera parte del proyecto y luego subsanada.
"Cuando nosotros entramos a supervisar no encontramos ese problema. Lo que puede pasar es que en una primera etapa de construcción, puede haber habido errores o fallas que, al ser detectados por la consultora (GIE), después se corrigieron", arguyó Dammert.
"Independientemente de lo que diga el informe, nosotros siempre hemos dicho que cuando hemos supervisado las obras ha habido cosas con las que no hemos estado satisfechos y por eso hay multas y fianzas. Si la empresa ha tenido deficiencias, se le ha multado y además ha tenido que subsanarlas. Y se ha pedido a la empresa que coloque más supervisores", aseveró.
Dammert se manifestó de acuerdo con algunas de las recomendaciones de E-Tech, como el estudio de todas las soldaduras, y reconoció que Osinerg sólo hizo una evaluación de muestras de la tubería.
Powers anunció que entregaría a las autoridades peruanas una copia del segundo informe, "para que sepan que es necesario ir hasta el fondo en este asunto".
