La bandera de dos puntas de Nepal flamea con frecuencia en el Foro Social Mundial en Karachi, Pakistán. Activistas nepaleses acudieron a la reunión para cuestionar la dictadura del rey Gyanendra y también para buscar soluciones a sus problemas sociales.
En algunos casos, ambos objetivos convergen, dijeron a IPS participantes de Nepal en el Foro, que comenzó el viernes y concluirá este miércoles.
Organizaciones comunitarias de la llanura boscosa del sur del país, por ejemplo, se enfrentan con la reticencia del gobierno a entregarles tierras y las ocuparon para manejarlas de manera sustentable, dijo Bhola Bhattarai, de la Federación de Comunidaes de Usuarios de Bosques de Nepal (FECOFUN).
Las 337 familias que integran esos grupos controlan, en promedio, 215 hectáreas de bosques, en los que desarrollan actividades que les han permitido un ahorro de más de 1.000 dólares, según un informe de FECOFUN publicado el año pasado.
"Esto es movilización social. No es un proyecto, no es conducido por organizaciones no gubernamentales. Es algo que la gente hace por sí misma." Ése será el mensaje que, según Bhattarai, FECOFUN llevará a Karachi.
El enfoque autónomo resulta exitoso en algunos casos, pero en otros hubo enfrentamientos con el gobierno del rey Gyanendra, quien encarceló a su propio primer ministro y se atribuyó todo el poder político el 1 de febrero de 2005, prometiendo restablecer la democracia multipartidaria y acabar en tres años con la insurgencia maoísta surgida 10 años antes.
Soldados y policías, por ejemplo, ocuparon bosques en busca de rebeldes maoístas, con lo que bloquearon el acceso de las comunidades a sus recursos. El año pasado, la dictadura de Gyanendra decretó una ordenanza sobre los bosques que, según FECOFUN, amenaza la autonomía de los 14.000 grupos locales que los manejan de manera comunitaria.
"El proceso de las comunidades de los bosques es democrático. Aquellos que creen en la democracia lo apoyan, pero el actual gobierno no cree en ella", dijo Bhatarai.
"Llamamos a la comunidad global a restablecer la democracia en Nepal" es la consigna que FECOFUN llevará a Karachi.
Se trata de la tercera etapa del Foro Social Mundial de 2006. Las dos anteriores se celebraron en enero en Bamako (entre el 19 y el 23) y en Caracas (desde el 24 y el 29). El Foro surgió en 2001 como respuesta al Foro Económico Mundial, que convoca a empresarios y gobiernos en la ciudad suiza de Davos.
Unas 20.000 personas asisten a la conferencia para deliberar sobre el alivio de la deuda pública de los países pobres, la esclavitud y el vínculo entre religión y derechos humanos en Pakistán, entre otros muchos asuntos que se ventilarán en 460 reuniones.
La mayoría de los delegados proceden de India, Sri Lanka y Bangladesh.
La filial nepalesa de la organización humanitaria ActionAid enviará al Foro a siete de sus trabajadores y a 13 activistas de organizaciones con las que mantiene vínculos.
Su acción en esta instancia se concentrará en el Fondo Mundial para la lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, el carácter inclusivo del desarrollo sustentable y la Convención de la Asociación para la Cooperación Regional de Asia Meridional (SAARC) para Impedir y Combatir el Tráfico de Mujeres, vigente desde 2002 en los siete países del boque.
"El Foro genera interés político y entusiasmo más que llegar a conclusione", dijo a IPS Anil Pant, director del equipo de ActionAid a cargo del programa de seguridad humana y gobernanza.
Al reunir a varios movimientos sociales, se abre camino a "la fertilización cruzada" y redunda en una sensación de solidaridad, la cual es importante "porque a veces uno siente que pelea solo", sostuvo.
El Foro Social Mundial es un espacio propicio para las protestas. "Llevaremos la bandera nepalesa. Si llegamos a reunir a 50 personas, haremos una manifestación" contra la dictadura de Gyanendra, afirmó Pant.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) alertó en 2005 sobre la amenaza del sida en Nepal.
"La información sugiere que Nepal ingresó en la etapa de epidemia concentrada. Eso significa que la prevalencia del VIH (virus de inmunodeficiencia humana, causante del sida) excede el cinco por ciento en algunos sectores de la población, como trabajadoras sexuales y usuarios de drogas inyectables", indica el estudio.
Si se mantienen las tendencias, la epidemia se trasladará al resto de la población, según el PNUD, lo cual abre paso a "la posibilidad de una epidemia explosiva".
Aun frente a este panorama "no recibimos ningún dinero del Fondo Mundial y no logramos que nos dieran una justificación convincente", advirtió Pant, para explicar por qué el asunto será una de las prioridades de su agenda en Karachi.
"No queremos que la gente se despierte de repente un día para darse cuenta de que hay una crisis", advirtió.
Por otra parte, consideró Pant, los gobiernos de la SAARC no se han tomado en serio la convención regional contra el tráfico de mujeres. Se calcula que 150.000 mujeres son traficadas en Asia meridional todos los años. (