ZIMBABWE: Oposición busca fondos

La financiación de las campañas electorales siempre está en la mente de candidatos y ciudadanos en vísperas de comicios, y Zimbabwe, que atraviesa una grave crisis política y económica, no es la excepción.

En medio de la preocupación por una reiteración de la violencia electoral de 2000 y 2002, el opositor Movimiento por el Cambio Democrático (MDC) enfrenta el desafío de financiar su campaña en un país que registra una de las mayores tasas de inflación y desempleo del mundo.

Zimbabwe celebrará elecciones parlamentarias en seis semanas. Los dos comicios anteriores, el parlamentario y el presidencial de 2000 y 2002 respectivamente, se caracterizaron por la violencia, principalmente contra la oposición.

Además, el gobernante ZANU-PF fue acusado de monopolizar los medios estatales de prensa y de fraguar el padrón electoral para asegurarse su victoria frente al MDC, su principal rival.

Inicialmente, el MDC anunció que boicotearía las próximas elecciones, pero cambió de posición este mes. Su portavoz, Paul Themba Nyathi, se quejó de que las donaciones locales disminuyeron bajo el peso de las dificultades económicas.

”Sin importar cuánto pueda recaudar de sus amigos, la oposición nunca podrá igualar al partido de gobierno, porque, éste tiene acceso a recursos de los que puede abusar”, comentó el analista político Lovemore Madhuku.

El MDC cumple los requisitos para recibir fondos del gobierno por haber obtenido casi la mitad de los escaños disputados en la última elección parlamentaria. Sin embargo, funcionarios del partido señalaron que el dinero no les alcanza.

El año pasado, el partido opositor recibió del gobierno unos 55.000 dólares, mientras que sólo por concepto de salarios debió pagar 18.000 dólares, destacó el secretario general, Wlshman Ncube.

En una medida que sorprendió a muchos, el gobierno anunció que este año desembolsará unos 560.000 dólares para el MDC y casi 600.000 dólares para el ZANU-PF.

Eddie Cross, asesor económico del MDC, celebró el anuncio. Sin embargo, ”sólo el despliegue de nuestros agentes electorales en los miles de centros de votación nos costará más que el total de la subvención estatal en un solo día”, señaló.

El tiempo al aire en radio y televisión costará a los partidos 700 dólares el minuto en las horas de mayor audiencia.

Por su parte, el gobierno acusa al MDC de obtener fondos de los gobiernos de Gran Bretaña, ex dominador colonial de Zimbabwe, y de Estados Unidos.

Tanto el primer ministro británico Tony Blair como el presidente estadounidense George Bush se transformaron en los blancos principales de la ira de Harare después de que condenaron la controvertida reforma agraria de Zimbabwe, supuestamente dirigida a corregir desequilibrios raciales en la propiedad de la tierra, y las violaciones a los derechos humanos.

Las quejas del gobierno de Robert Mugabe podrían aumentar a raíz del lanzamiento este mes de una campaña de ”individuos preocupados” que procuran recaudar fondos, dentro y fuera de Zimbabwe, para lo que llaman ”apoyo al proceso democrático”.

El pedido, distribuido por correo electrónico, contiene un número de cuenta bancaria en la vecina Sudáfrica donde se pueden depositar donaciones. Los donantes de Zimbabwe pueden enviar cheques y órdenes de pago a una dirección postal a nombre de ZIMFUND.

Además de dinero, los organizadores de esta iniciativa piden 2.400 vehículos y conductores para transportar observadores partidarios a los centros de votación en la jornada electoral.

”Treinta dólares llenan el tanque de un vehículo, y 50.000 rands (equivalentes a 8.700 dólares) financian la campaña en un distrito”, dice el pedido.

Mientras, la libertad de expresión brilla por su ausencia. Cuatro periodistas que trabajan para medios de prensa extranjeros huyeron de Zimbabwe en los últimos días, después que la policía secreta los acusó de espionaje y de difamación contra el gobierno. (

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe