Polémica por papel de la Organización de Estados Americanos (OEA) en proceso de diálogo entre el gobierno de Colombia y los paramilitares derechistas. El miércoles, el vicepresidente Francisco Santos dijo que la falta de credibilidad de los diálogos se debe a que la OEA no cumple bien la función de veedor. Y el jueves un delegado de un número considerable de organizaciones no gubernamentales entregó en las oficinas de la OEA en Bogotá una carta en la que hacen reparos a esta misión. Los grupos cuestionan, principalmente, que el reiterado incumplimiento del cese de hostilidades por parte de los paramilitares esté ocurriendo "sin que la opinión nacional haya conocido hasta ahora una posición sobre el particular" y el hecho de la participación directa de Sergio Caramagna, jefe de la misión en Colombia, en la mesa de negociación, pues dicen que afecta su imparcialidad.
