El anuncio de nuevos racionamientos en el suministro de gas natural a Chile tensionó aún más las relaciones de ese país con Argentina, que ya restringió a casi la mitad el envío pactado del energético. Políticos y empresarios chilenos exigen a su gobierno que haga valer todos sus derechos en todas las instancias que correspondan para sancionar a Argentina por el racionamiento de gas, considerado por ellos violatorio del acuerdo bilateral sobre energía firmado en los años 90. Buenos Aires decidió reducir aún más el volumen de gas enviado a Chile, que está racionado desde comienzos de este mes, debido a que aumentó el consumo interno por la bajas temperaturas que soporta el país ante la inminencia del invierno austral. La medida fue aplicada el sábado, en la misma semana en que Argentina firmó un contrato de compra del combustible con Bolivia, que le impuso como condición no vender a su vez ese producto a Chile.