La exhortación del gobierno de Japón a denunciar extranjeros sospechosos de permanecer en este país en forma ilegal es una violación a los derechos humanos, afirmaron activistas.
En el marco de la restricción de sus políticas de inmigración, el Ministerio de Justicia lanzó un sitio web en el que solicita a los japoneses que denuncien a esos extranjeros.
No permitiremos que el gobierno haga esto. La página web claramente incita a la discriminación racial, declaró Sonoko Kawakami, integrante de la organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional, con sede en Londres.
El sitio oficial no obliga a los visitantes a identificarse, pero los estimula a ofrecer por Internet datos personales sobre los extranjeros que podrían estar viviendo en Japón sin visa, como la nacionalidad, el lugar de trabajo y el domicilio. Además, califica a los extranjeros indocumentados como personas que molestan o causan preocupación a sus vecinos.
Por tales motivos, el sitio infringe el mandato del Ministerio de Justicia de ofrecer protección a los derechos humanos, denunciaron los activistas.
Según Kawakami, la exhortación a la denuncia infringe la Convención Internacional para la Eliminación de Toda Forma de Discriminación Racial, que Japón firmó en 1995. Los grupos de derechos humanos lanzaron una campaña para modificar el sitio.
Estamos determinados a obligar al gobierno a poner fin a este terrible abuso contra los extranjeros. El sitio web ignora el duro trabajo de los extranjeros, que es tan importante para la economía japonesa, señaló Miyoko Honda, portavoz del Sindicato de Trabajadores Migrantes, establecido en Tokio hace dos años.
El sindicato fue fundado para ayudar a trabajadores indocumentados, principalmente de Africa y países asiáticos extranjeros, que llegan a Japón dispuestos a hacer los trabajos peligrosos, sucios y mal remunerados que los japoneses rechazan.
En el sindicato, los trabajadores obtienen ayuda para cobrar salarios atrasados, compensación por lesiones laborales y mejor remuneración por turnos mayores a 12 horas.
El Ministerio de Justicia, alegando que los crímenes cometidos por extranjeros aumentaron el año pasado, también impuso estrictos controles a estudiantes del exterior y a solicitantes de refugio, y presentó un proyecto de ley para imponer penas más duras a los trabajadores ilegales.
Actualmente, los extranjeros detenidos sin visa válida son penados con una pequeña multa y la deportación inmediata. La ley propuesta aumentaría la multa al equivalente a 30.000 dólares e impondría penas de prisión de hasta tres años.
Más de 70 por ciento de los 250.000 extranjeros que viven en Japón sin documentos ingresaron a este país con visas de corto plazo, según la oficina de inmigración.
Un funcionario que solicitó reserva dijo que el nuevo sitio, lanzado el 16 de febrero, forma parte de la computarización de los datos sobre inmigración.
No promovemos el espionaje de extranjeros y no usaremos la información para detener de inmediato a los sospechosos, declaró, y agregó que en 2002, unas 75.000 personas enviaron información a la policía por teléfono o correo electrónico.
Kawakami replicó que la oficina de inmigración ni siquiera tiene conciencia de cómo el nuevo sitio web puede estimular la xenofobia. Esto demuestra la poca protección que el gobierno ofrece a los extranjeros, agregó.
Según Honda, la negligencia oficial forzó al Sindicato de Trabajadores Migrantes a intervenir en el caso de un hombre de Bangladesh que quedó discapacitado en forma permanente luego que su patrón lo lastimara por accidente con una carretilla elevadora, rompiéndole la espina dorsal.
Al principio, su empleador se negaba incluso a llevarlo al hospital. Al final, logramos que le pagara una compensación por su lesión, relató.
Jaffer Mohamed, un empleado de una fábrica de Sri Lanka en el norte de Tokio, opinó que el gobierno debería darle una visa. Yo trabajo duro y pago mis impuestos, dijo.
Los activistas están de acuerdo. En lugar de crear sitios web discriminatorios, el gobierno debería reconocer el duro trabajo de estos extranjeros y concederles el estatuto legal, exhortó Honda.
Estudios realizados por el sindicato revelaron que los trabajadores asiáticos extranjeros reciben la mitad del salario que sus homólogos japoneses, viven en condiciones infrahumanas y padecen estrés psicológico en su trabajo.
Numerosos expertos y observadores opinan además que Japón debería abrir sus puertas a los inmigrantes como forma de impulsar el crecimiento económico. (
