El documento sobre la situación humanitaria en el mundo elaborado anualmente por el Departamento de Estado de Estados Unidos cuestionó por igual al gobierno de Colombia, Alvaro Uribe, por subestimar las denuncias de violaciones a los derechos humanos en este país, como a las organizaciones no gubernamentales (ONG) por magnificarlas. "La dependencia del gobierno en solo reportes oficiales, sin lugar a dudas, condujo a una subvaloración de las violaciones. Las estadísticas de las ONG, por haber dependido ampliamente en reclamos sin fundamento, sin duda las sobrevaloró", dice el capítulo que dedica a Colombia 65 páginas de su reporte, que no abarca la situación interna de Estados Unidos.