El Foro Social Mundial (FSM) dio un paso histórico al trasladarse de Brasil a India, pero aún tiene mucho por mejorar, concluyeron activistas persuadidos de la necesidad de llevarlo a Africa en 2006.
Formalizar propuestas, ampliar aun más la participación de sectores sociales, promover mayor solidaridad entre las distintas comunidades del mundo y trasladarse a otros países del Sur fueron algunas de las ideas presentadas en el cuarto FSM, que se realiza desde el viernes y hasta este miércoles en la occidental ciudad india de Mumbai.
Los aplausos brotaron espontáneos en paneles y conferencias cada vez que algún expositor insistía en llevar el Foro a alguna ciudad africana. Y la idea va tomando fuerza.
”Estamos trabajando para organizar el FSM después del de Porto Alegre. Estamos planeando que se realice en El Cairo en 2006. Muchas organizaciones de Africa y en países árabes nos apoyan. Todos están interesados. Esta es nuestra esperanza”, dijo a IPS la escritora y activista egipcia Nawal el Saadawi.
Las tres primeras ediciones del FSM se realizaron en la meridional ciudad brasileña de Porto Alegre, en 2001, 2002 y 2003, y ya está previsto que allí volverá el año próximo.
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”Yo lucharé por esto (llevar el Foro a El Cairo), mas si otro país africano recibe al FSM estará bien igualmente. Pero tiene que ser en Africa”, dijo contundente El Saadawi, la fundadora de la Asociación para la Solidaridad de las Mujeres Arabes.
La sede africana en 2006 también es respaldada por el sociólogo portugués Boaventura Sousa Santos, uno de los principales impulsores del FSM e integrante de su Consejo Internacional.
”Creo que Mumbai tiene una significación histórica, porque demuestra que el espíritu de Porto Alegre puede ser repetido en Asia. Y si puede ser repetido en Asia, ¿por qué no en Africa? La mundialización del FSM está comenzando aquí”, dijo Santos este martes, arrancando aplausos en la conferencia ”Neoliberalismo y guerra, y la importancia del FSM”.
”Antes, muchas personas decían que el FSM era un acontecimiento occidental y latinoamericano. Ahora, nadie puede decir eso”, destacó.
Sin embargo, El Saawadi admitió que llevar el Foro a su continente puede afrontar grandes obstáculos, en especial de los gobiernos africanos.
”Los regímenes locales son dictaduras que trabajan para (el presidente de Estados Unidos) George W. Bush. Nuestra asociación fue clausurada por el gobierno porque nos opusimos a la guerra del Golfo de 1991 (contra Iraq). Y todavía está clausurada”, indicó la activista.
El FSM va creciendo cada año. En 2001 asistieron 20.000 personas de 117 países, mientras que en 2002 concurrieron 50.000 de 123 nacionalidades diferentes y al año siguiente 100.000 participantes de 130.
Según los organizadores en Mumbai unas 150.000 personas están participando de las actividades, procedentes de 130 países.
Pero el éxito de convocatoria no es suficiente, coinciden muchos delegados de la sociedad civil.
El francés Christophe Aguiton, encargado de relaciones exteriores de la Asociación para una Tasa a las Transacciones financieras de Ayuda al Ciudadano (ATTAC), subrayó la necesidad de que el FSM no sea sólo un espacio de discusión, sino también de coordinación de campañas entre todos los grupos civiles del mundo. Y para explicarlo tomó de ejemplo a los que llamó ”enemigos”.
”El Foro Económico Mundial también es un espacio. El capitalismo mundial se reúne en (el centro turístico suizo de) Davos a fines de enero, pero también tiene todas las herramientas que necesita: al Fondo Monetario Internacional, al Banco Mundial y al Grupo de los Ocho” países más poderosos, señaló.
Por primera vez, el FSM coincidirá sólo un día con el Foro de Davos, que se iniciará este miércoles (cuando se clausure el encuentro de Mumbai) y continuará hasta el domingo.
”Nosotros no tenemos esa clase de herramientas, y por eso el único lugar en que podemos organizar nuestras campañas es aquí”, añadió.
Con él coincidió el periodista ítalo-argentino Roberto Savio, presidente emérito de la agencia de noticias IPS, quien subrayó la importancia de canalizar las ideas presentadas en el FSM ”a través de una estructura que las traduzca en políticas concretas y alternativas al modelo neoliberal”.
Mientras, el pacifista israelí Michael Warschawski, del Centro de Información Alternativa, subrayó la necesidad de que el Foro sirva para fomentar la solidaridad entre distintos lugares del mundo que están padeciendo conflictos, como Palestina.
Warschawski destacó que el FSM se convirtió en un centro de información anual de las distintas luchas sociales que se llevan a cabo en el mundo, y ha dado lugar a ”una nueva clase de solidaridad”, reconoció.
Pero este proceso debe ser mejorado en próximas ediciones.
”Tenemos que mejorar año a año el pluralista y abierto intercambio de opiniones y experiencias para entender mejor el mundo en que vivimos, y comenzar a elaborar alternativas”, dijo.
El israelí se sumó a Aguiton al señalar la necesidad de que el FSM no sea solo lugar de debates, sino de orientación de políticas concretas, y propuso además dar especial participación a los sindicatos.
En el futuro, el Foro debe buscar formas de articular sus acciones con los partidos políticos, y profundizar en particular el diálogo con el gobernante Partido de los Trabajadores de Brasil, sugirió Warschawski.
”No estoy hablando de pasar a ser un movimiento de partidos, y ni siquiera de tener partidos en el movimiento, sino de la articulación necesaria con las fuerzas políticas progresistas”, indicó.
Aguiton, más cauto, subrayó la importancia de que el FSM mantenga su independencia de las fuerzas políticas.
Los partidos políticos ”ya están dentro del FSM, pero no participan del proceso de toma de decisiones. Creo que eso es bueno, porque son parte de la vida democrática. Pero en la toma de decisiones es mejor dejar que los movimientos sociales tengan la palabra”, dijo el activista francés a IPS.