El ministro venezolano de Energía y Minas, Rafael Ramírez, descartó hacer cambios en la actual directiva de la empresa estatal Petróleos de Venezuela y afirmó que su proceso de reestructuración "está vivo, es dinámico y tiene que ser ampliamente discutido en el seno de la industria". A partir de ahora, de manera trimestral se analizará toda la gestión del conglomerado petrolero, desde los negocios hasta el presupuesto para evitar errores en la ejecución de los planes, dijo el funcionario. Los profundos cambios en la dirección de Petróleos de Venezuela fueron uno de los detonantes de la crisis política desatada en 2002.