Xenofobia y admiración en Ecuador por la invasión de colombianos. Cada vez es más notoria la presencia de ciudadanos de Colombia que llegan a las principales ciudades ecuatorianas como profesionales, inversionistas o desplazados de sus hogares por la guerra civil de más de 40 años. "Se necesita empleada para mostrador, preferiblemente colombiana". "Se arrienda apartamento, no aceptamos colombianos". Así, con la ambivalencia de estos dos avisos publicados en un diario ecuatoriano, conviven aprecio y xenofobia en los ecuatorianos frente a los inmigrantes de Colombia.