Bolivia finalizó 2003 con graves problemas económico, con un déficit fiscal de nueve por ciento del producto interno bruto, alto desempleo y con el sector productivo paralizado. Esta situación, según economistas, no cambiará si la política gubernamental continúa aplicando un modelo ortodoxo y neoliberal. Los expertos Alberto Bonadona y Carlos Villegas y el ministro de Desarrollo Económico, Xavier Nogales, coincidieron en que la salida es consolidar un programa que genere empleo, que escuche a los sectores más empobrecidos, que respalde a los microempresarios y otorgue condiciones productivas para lograr la reactivación. La exportación de gas natural no será realidad a corto plazo y, por tanto, no se puede pensar en que con él se pueda resolver los problemas del país este año, añadieron.
