Beneficiaria de la actual tranquilidad en el mercado, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) mantuvo intacta su oferta y por consiguiente los precios en los mercados internacionales descendieron al menos unos centavos de dólar.
El crudo Brent, marcador del Mar del Norte, se cotizó este viernes en el mercado de Londres a 29,15 dólares el barril de 159 litros, ocho centavos menos que el jueves, cuando había trepado 15 centavos por unidad mientras los ministros de la OPEP deliberaban en Viena.
También el estadounidense West Texas Intermediate (WTI) se deslizó a la baja ocho centavos por barril en el mercado de Nueva York y se vendió a 31,18 dólares la unidad. La cotización de la víspera fue hasta 16 centavos más alta que la del miércoles.
A su vez, la canasta de siete crudos de la OPEP progresó en la semana y se vendió a un promedio de 28,33 dólares el barril, apenas 16 centavos más que la última semana de noviembre, informó el Ministerio de Energía de Venezuela.
"Estos niveles de precios reflejan la sólida demanda petrolera que se está registrando en los principales centros consumidores, señaló el informe semanal venezolano.
La OPEP, integrada por Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Arabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela, y defiende para su cesta un precio en la banda de 22 a 28 dólares por barril.
Durante noviembre y en lo que va de diciembre, el precio de esa canasta ha estado sobre los 28 dólares, después que el grupo oficialmente redujo en 900.000 barriles diarios su oferta respecto de octubre, de 25,4 a 24,5 millones de barriles por día.
La OPEP reunió su conferencia ministerial el jueves y decidió mantener inalterado el volumen de oferta y que corresponde aproximadamente a un tercio de la demanda mundial, de 78 millones de barriles por día.
Pedidos como el del ministro venezolano de Energía, Rafael Ramírez, para recortar aún más la producción a fin de apuntalar los precios, fueron descartados en beneficio de lo que su par saudita, Alí al-Naimi, llamó "una acción proactiva.
"Aunque el mercado está equilibrado, tenemos que ser muy cautelosos sobre los próximos meses, dijo al-Naimi, cuyo país, que produce un tercio del total de la OPEP, tampoco apoyó pedidos desde el mundo industrializado para abrir más los grifos.
La OPEP "se comporta como si quisiera precios no entre 22 y 28 dólares el barril, sino más allá de 25 dólares, deploró Claude Mandil, director de la Agencia Internacional de Energía, de los grandes países consumidores industrializados.
Más aún, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha propuesto pasar de la actual banda de 22 a 28 dólares por barril a una de 25 a 32 dólares, pero la OPEP no ha discutido esa hipótesis.
El comunicado final de la reunión del jueves en Viena destacó "la declinación del poder de compra del barril debido a la debilidad actual del dólar de cara a otras divisas, el euro y el yen. El menor valor del dólar encarece las inversiones y las compras que los grandes productores petroleros del Golfo efectúan en Europa y Japón.
La OPEP, por otra parte, ha reconocido una sobreproducción propia cercana a los dos millones de barriles, pues en octubre se extrajeron 27,4 millones de unidades, y se inquieta por las estimadas mayores producciones de Rusia e Iraq en 2004.
Si el mercado actual "está suficientemente abastecido, como ha repetido hasta el cansancio el secretario general de la OPEP, el venezolano Alvaro Silva, el grupo se inquieta por el impacto sobre los precios que a lo largo de 2004 tendrá la nueva oferta.
En particular Iraq, ocupada por Estados Unidos y cuya producción está fuera del sistema de cuotas del resto de los socios de la OPEP, produce ya 1,5 millones de barriles diarios y exporta sobre un millón de unidades, previéndose que estará en capacidad de exportar hasta dos millones de barriles diarios desde el segundo trimestre del año venidero.
El ministro kuwaití de petróleo, Ahmad Fahad al-Sabah, advirtió a sus colegas que la OPEP podría necesitar un recorte adicional de 750.000 barriles diarios en algún momento del primer trimestre de 2004 para abrir espacio a la nueva producción iraquí.
Analistas de grandes bancos europeos de inversión coinciden en que el panorama puede ser duro para la OPEP y su política de precios si la mayor oferta previsible se vuelca sobre un panorama de crecimiento modesto de la economía y, con ello, un dólar en retroceso merme aún más el poder de compra de los productores.
En cualquier caso, una reunión extraordinaria de la OPEP el 10 de febrero en Argelia pasará revista a la situación, confirmó su secretaría.
Este cargo, por cierto, quedará provisionalmente en enero en manos del presidente de turno de la OPEP, el ministro indonesio Purnomo Yusgiantoro.
El actual titular, Silva, reemplazó hace año y medio a su compatriota Alí Rodríguez, quien entonces asumió la conducción del grupo estatal Petróleos de Venezuela.
Para el próximo trienio se han postulado como candidatos el propio Silva, el iraní Hadi Nejad Hosseinian y el kuwaití Adnan Shibab-Eldin. En la reunión del jueves no hubo consenso para escoger al nuevo secretario y la decisión quedó para la cita de febrero o para otra conferencia, ordinaria, a fines de marzo en Viena.
