El subsecretario adjunto de Defensa de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, Rogelio Maurer, llegó a Bolivia para hacer lo que calificó una "revisión de rutina" sobre las relaciones y la cooperación militar entre ambos países, justo unos días antes de que expire el plazo fijado por Washington para que este país ratifique el acuerdo de inmunidad ante la Corte Penal Internacional (CPI). Maurer es acompañado por el director de Estrategia, Políticas y Planes en los Cuarteles Generales del Comando Sur de Estados Unidos, Wendell Griffin, quien es el responsable de promulgar políticas de índole militar para 30 países y 14 dependencias. El gobierno estadounidense de George W. Bush intimó a varios gobiernos de América a firmar acuerdos de inmunidad para sus ciudadanos en caso de que cometan delitos de los que tiene competencia la CPI a cambio de mantener la asistencia militar que hubiera en vigor.