Amenazado de desaparición y ante la incontenible espiral de violencia en Iraq, el Consejo de Gobierno Provisional promete reformarse y transformarse en la autoridad eficaz que Estados Unidos pretende. Pero quizá las promesas sean pocas y tardías.
Luego de una reunión de emergencia en Washington, Paul Bremer, el administrador civil estadounidense en Iraq, reconoció que una de las opciones en estudio es la creación de otro gobierno provisional, semejante al de Afganistán, con miras a acelerar el traspaso de poder a los iraquíes.
Bremer, jefe de la Autoridad Provisional de la Coalición, también afirmó el miércoles tras dos días de reuniones en la Casa Blanca que su gobierno está determinado a combatir el terrorismo en Iraq.
El presidente estadounidense George W. Bush confirmó esas declaraciones este jueves, y envió a Bremer de vuelta a Iraq para trabajar en un plan que acelere el establecimiento de un gobierno iraquí definitivo.
Es evidente que los planes de transferencia de poder se apresuraron debido a los ataques cada vez más feroces de la resistencia iraquí contra las fuerzas de la coalición ocupadora, encabezada por Estados Unidos.
El último atentado contra la coalición fue el del miércoles contra una base militar italiana en la meridional ciudad de Nasiriya, que dejó 27 muertos, 18 de ellos italianos, y cerca de 80 heridos.
El día 2, miembros de la resistencia iraquí habían causado la muerte a 15 soldados estadounidenses al derribar un helicóptero de transporte Chinook, y cinco días después habían matado a otros seis al derribar un helicóptero Blackhawk.
Además de los italianos, más de 222 soldados estadounidenses y británicos murieron en Iraq desde que Bush dio por terminada la guerra, el pasado 1 de mayo. Durante las operaciones, murieron otros 172.
La certeza de una reforma mayor del sistema de administración está instalada en Bagdad y Washington, pero no está claro en qué consistirá esa reforma.
Se manejan varias posibilidades, desde la modificación o disolución del Consejo de Gobierno Provisional hasta la designación de un supervisor al estilo de Afganistán. El presidente afgano, Ahmed Karzai, está respaldado por un gobierno interino.
Son muchas las razones de la decepción de Estados Unidos con el consejo iraquí que Washington mismo designó.
En la esperanza de mejorar la situación en Iraq antes de las elecciones presidenciales del año próximo, Washington esperaba que el Consejo avanzara rápidamente en la redacción de una Constitución que preparara el camino para la celebración de elecciones.
Pero eso no ocurrió. Aunque en público Bremer y sus principales asesores elogian a los miembros del Consejo, en privado no escatiman críticas.
Son un grupo de personas más interesadas en sus propios negocios y en promover sus objetivos personales y políticos que en hacer su trabajo, declaró un miembro de la Autoridad Provisional de la Coalición que solicitó reserva.
Según la resolución 1511 del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas, el Consejo de Gobierno Provisional debe presentar antes del 15 de diciembre un cronograma y un programa para redactar la nueva Constitución y convocar a elecciones.
El secretario de Estado (canciller) de Estados Unidos, Colin Powell, dijo en septiembre que seis meses serían suficientes para redactar la Constitución, pero los funcionarios iraquíes dicen que precisan entre nueve y 12 meses.
El Consejo de Gobierno Provisional todavía está discutiendo el marco básico y el principio de la Constitución, pero Washington cree que está perdiendo el tiempo.
Miembros del Consejo declararon que ya captaron el mensaje.
El Consejo entiende que debe convertirse en un organismo de decisión más eficaz, declaró Qubad Talebani, hijo y asistente del actual presidente del Consejo, Jalal Talebani.
Sabe que le falta autoridad ejecutiva, por esos sus miembros están buscando un mecanismo que les permita adquirirla, agregó.
Actualmente, las decisiones del Consejo de Gobierno Provisional deben ser aprobadas por la mayoría de sus 24 integrantes, y esto se está convirtiendo en un problema.
Estamos hablando de un consejo en que un representante del partido socialista se sienta entre delegados de la Hermandad Musulmana y del partido comunista. No son sólo 24 personas, son casi 24 ideologías diferentes. No es fácil que se pongan de acuerdo en algo, dijo un asesor de un miembro del Consejo.
Una alternativa en discusión es concentrar el proceso de decisión en un organismo ejecutivo de tres o cuatro miembros.
Otra es controlar más de cerca los viajes al exterior de los miembros. Una de las principales quejas de funcionarios estadounidenses es que cerca de la mitad de los miembros del Consejo están viajando en cualquier momento dado, o no asisten a las sesiones.
Quizá nosotros estemos más insatisfechos que ellos. Hubiéramos querido que las cosas avanzaran más rápidamente, declaró Adnan Pacheche, miembro del Consejo, en referencia a la decepción expresada por Estados Unidos.
Según Pacheche, muchas de las demandas de Washington carecen de visión.
Para elaborar una Constitución adecuada, primero deben cambiar muchas cosas. Se precisan leyes electorales, un censo de población, un sistema de votación, y una reforma del sistema judicial, dijo.
Algunos miembros sugirieron el modelo aplicado en Afganistán, es decir, designar un gobierno interino por algunos meses, y luego redactar y votar una Constitución. El problema es quién designaría ese gobierno y quién sería su líder.
Sabemos que si nosotros designáramos a ese gobierno interino sería como formar un nuevo Consejo Provisional, y eso no resolvería el problema, dijo el funcionario de la Autoridad Provisional de la Coalición.
Además, no conocemos a ningún 'hombre fuerte' iraquí que pueda encabezar el gobierno hasta que se celebren elecciones, agregó.
Por otro lado, los miembros del Consejo Provisional quieren garantizar su propia supervivencia política. Algunos han dicho que presionarán a Bremer para que amplíe el actual consejo, y si ese intento fracasa, pedirán designar ellos mismos un nuevo gobierno interino.
En general, los gobiernos interinos no son elegidos, por lo tanto el Consejo Provisional lo designaría, dijo Pacheche.
Podríamos encontrar alguna forma de hacerlo más 'elegible' o representativo, mediante elecciones de emergencia, sin tener que cumplir con los requisitos regulares, como un censo de población previo, sugirió. (