La crisis económica en Colombia hizo que en las áreas urbanas uno de cada cinco jefes de hogar perdiera el empleo. Ello trajo aparejado la disminución en los gastos en alimentos y vestuario y el atraso en el pago de las pensiones escolares, las cuotas de vivienda y los servicios públicos, según un informe divulgado el martes. Esta segunda Encuesta de Calidad de Vida fue realizada por el Dirección Nacional de Estadísticas en 24.090 hogares entre el 12 de marzo y el 16 de mayo pasados (incluidos 13.200 hogares bogotanos entrevistados entre el 6 de junio y el 23 de julio), que durante aproximadamente tres horas respondieron 600 preguntas.
