Una firma tabacalera de Estados Unidos se propone aprovechar las estrictas normas contra el hábito de fumar en la promoción de un nuevo formato para mascar, con ciertas ventajas sobre el tradicional tabaco sin humo pero con el mismo nivel de nicotina.
La industria del tabaco sin humo (rapé para aspirar y en hebras para mascar) gana 2.000 millones de dólares anuales en este país. La mitad del sector es controlado por la empresa U.S. Smokeless Tobacco (UST), que lanzó Revel, un tabaco para mascar que no provoca la habitual y desagradable expectoración.
Revel también se distingue por sus paquetes atractivos, más fáciles de usar que las tradicionales latas, y por presentarse con distintos sabores, entre ellos menta. UST lo define como una modalidad limpia, pulcra y discreta de mascar tabaco.
La empresa insiste en que el público al que apunta son los fumadores adultos, pero activistas de la salud pública mostraron su preocupación por que la campaña publicitaria destaque frente a niños y adolescentes el atractivo de un producto peligroso y adictivo.
Otro temor es que la promoción de Revel —que hace hincapié en la frase en cualquier momento, en cualquier lugar— disuada a los fumadores que desean abandonar totalmente el tabaco.
Este eslógan apela claramente a los fumadores de estados como California, Delaware, Florida, Massachusetts y Nueva York, donde rigen estrictas leyes que prohíben fumar en bares, restaurantes y otros lugares públicos.
Pero el tabaco sin humo no es un sustituto seguro de los cigarrillos, dijo a IPS la portavoz de la Sociedad Estadounidense contra el Cáncer, Unice Lieberman.
Por otra parte, dijo Lieberman, enviciar a nuevos clientes es la esencia de la industria del tabaco, y la juventud de este país es el blanco favorito.
Ofrecer variedad de sabores es otro intento de apelar a los niños. Pero el hecho sigue siendo que el producto tiene la misma dosis de nicotina, aun sin humo, lo cual facilita el enviciamiento de los niños, agregó Lieberman.
Las ganancias de este sector quedan cortas frente al tabaco para fumar. La principal compañía tabacalera de Estados Unidos, Philip Morris, que controla la mitad del mercado de cigarrillos, ganó, sólo en el último trimestre, 1.600 millones de dólares.
UST planea promover Revel con un aviso de prensa en que los integrantes de una joven pareja se miran a los ojos. Yo era fumador, pero mi esposa odiaba el humo (…). Otra razón para cambiar a Revel, dice el texto.
La empresa admitió el carácter controvertido de su estrategia publicitaria, y por esa razón le pidió a la gubernamental Comisión Federal de Comercio (FTC) que revise y comente los avisos antes de lanzar una campaña de folletería por correo. El organismo aún no dictó su fallo.
Nuestro aviso no compara el riesgo para la salud del tabaco sin humo con el de los cigarrillos. Más bien muestra una razón por la cual los fumadores adultos, enfrentados con la reacción de otras personas, deberían cambiarse a Revel, dijo el portavoz de la empresa, Richard Verheij.
De todos modos, nos damos cuenta que cualquier aviso que proponga que los fumadores adultos se cambien a un producto innovador como Revel podría ser controvertido, sostuvo Verheij.
No es la primera vez que UST se ubica en el centro de una controversia. El año pasado, pidió también a la FTC opinión sobre la posibilidad de promover el tabaco para mascar como más saludable que los cigarrillos.
En la solicitud, la firma sostenía que no se ha demostrado que el tabaco sin humo sea causa de alguna enfermedad humana. Finalmente, la FTC rechazó la campaña, luego de intensas protestas de organizaciones como la Campaña por Niños Libres de Tabaco.
Esta afirmación trae reminiscencias de la época en que las grandes compañías tabacaleras negaban que fumar fuera causa de cáncer de pulmón, cuando todas las autoridades sanitarias estadounidenses afirmaban que sí.
El gubernamental Instituto Nacional del Cáncer estableció que el tabaco para mascar y el rapé cotienen 28 sustancias carcinógenas distintas y que multiplican el riesgo de enfermedades de la encía y de cáncer de labio, lengua, mejillas, encías y boca.
El tabaco sin humo puede originar sangrado de encías y lastimaduras en la boca que nunca cicatrizan, y al final puedes contraer cáncer, advierte un folleto de los gubernamentales Centros de Control de Enfermedades dirigido a adolescentes.
Los científicos sostienen que el tabaco así consumido es tan adictivo como los cigarrillos, y que, de hecho, la cantidad de nicotina absorbida por el organismo es de tres a cuatro veces mayor que la del tabaco fumado.
Las autoridades estadounidenses ordenan desde 1986 que los paquetes indiquen que el tabaco para mascar causa cáncer de boca y enfermedades de encías. Este producto no es una alternativa segura a los cigarrillos, indica la etiqueta.
El borrador de la Convención Marco sobre Control de Tabaco aprobada este año preveía la prohibición de la entrega de muestras gratuitas de tabaco sin humo, pero Estados Unidos se opuso con éxito a esa cláusula.
Las ganancias de UST, que vende más de 1,7 millones de latas de tabaco saborizado por día, cayeron seis por ciento este año, en buena medida a causa del aumento de la competencia y de los impuestos.
El despliegue militar estadounidense en el Golfo también recortó las ventas, pues los soldados son gran parte de la clientela de tabaco para mascar. UST desató otra polémica al enviar por correo muestras simples a militares en Iraq.
Legisladores acusaron a la empresa de violar un acuerdo que ésta contrajo en 1998 con 48 estados y varios territorios de no dirigir su publicidad a menores. Pero UST gastó el año pasado 9,4 millones de dólares en anuncios en revistas juveniles como Rolling Stone y Spin, cuando la inversión en 1997 fue de 3,6 millones.
La compañía afirma que su única intención es informar a los fumadores adultos que según muchos investigadores, el tabaco sin humo es una alternativa a los cigarrillos con una reducción significativa de daños.
Unos 7,6 millones de personas mayores de 12 años consumen tabaco sin humo. Quince por ciento de los estudiantes de los últimos años de enseñanza secundaria de sexo masculino usan el producto, y seis por ciento de los del primer tramo de ese ciclo.
UST tiene una larga historia de uso de productos saborizados, entre ellos Cherry Skoal, como productos de iniciación efectivos en convertir a los jóvenes consumidores en adictos, dijo Vance Willmore, de la Campaña por Niños Libres de Tabaco.
Debido en gran medida a esos productos de iniciación, entre 1965 y 1981 aumentó de 188.000 a 732.000 la cantidad de niños entre 12 y 17 años que usan tabaco sin humo por primera vez, agregó Willmore.