La comunidad internacional de los medios de comunicación está confundida por su papel en la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información. ¿Los periodistas asistirán para cubrirla o para participar en las deliberaciones?
La reunión que se celebrará en Ginebra entre el 10 y el 12 de diciembre se presenta como una cumbre original. Su intención es reconocer el impacto de la tecnología de la información en diversos grupos humanos y trazar una estrategia global de consenso.
Pero muchos dudan que los gobiernos estén, a su vez, preparados para escuchar a los medios de comunicación.
La institución de defensa de la libertad de prensa Reporteros Sin Fronteras manifestó su preocupación porque la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que convoca la cumbre, no ha invitado a suficientes medios de comunicación.
Mientras, los gobiernos que reprimen a los periodistas muestran poco interés en discutir con organizaciones de defensa de la libertad de expresión, advirtió la organización con sede en París.
El objetivo oficial de la cumbre es achicar la brecha digital entre los países ricos y los pobres. Pero con tanta energía puesta en las inversiones económicas con ese fin, muchos críticos advierten que se perderán de vista graves problemas que afrontan periodistas y organizaciones.
La mayoría de las instituciones de defensa de la libertad de expresión quieren que la declaración final de la cumbre consagre este derecho humano, o que, al menos, reitere el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como garantías de protección para los periodistas.
El artículo 19 establece: Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
Michel Bürer, de la Federación de Periodistas de Suiza, ha presionado por la inclusión de los problemas de los medios en la agenda de la cumbre, que se está convirtiendo en un foro más sobre tecnología que sobre contenidos.
La mayoría de los gobiernos del mundo en desarrollo y de los países industriales tienen interés en la tecnología. Algunos, en venderla, otros, en obtener dinero para comprarla, explicó Bürer.
El concepto de sociedad de la información tampoco es claro.
A primera vista, muchos periodistas podrían incluso considerar la cumbre más apropiada para ingenieros que para ellos y sus instituciones, más aun teniendo en cuenta que es organizada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones, organismo vinculado con asuntos técnicos y comerciales.
Esa concepción llevó a la convocatoria del Foro Mundial de Medios Electrónicos, que se celebrará en Ginebra al mismo tiempo que la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información.
Las delegaciones oficiales quisieron desalojar a los medios de comunicación, lo cual los obligó a establecer su propio espacio, interpretó el director ejecutivo del foro, Guillaume Chenevière.
Los gobiernos no quieren considerar a la prensa dentro de la sociedad de la información, quizás porque muchos la consideran un simple amplificador de su propaganda o porque tienen problemas con ellos cuando son libres, dijo Chenevière.
Es significativo que este gran foro de medios de comunicación se realice al margen de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información. Pero los organizadores del foro confían en que podrán obligar a los gobiernos y delegaciones empresariales a tomar en cuenta sus preocupaciones.
El foro presentará una declaración al secretario general de la ONU, Kofi Annan, en la ceremonia de apertura, para que éste la derive a la cumbre oficial.
La conferencia instaló su propia Oficina de la Sociedad Civil para facilitar esas contribuciones. Pero muchos periodistas y responsables de medios de comunicación creen necesitar su propia plataforma de discusión, dado que son afectados por gran cantidad de asuntos relacionados con la sociedad de la información.
Los periodisas podrían necesitar ayuda cuando se trasladen de uno a otro foro de debate, dijo Bührer. Nuestro problema como periodistas es que no tenemos experiencia ejerciendo presión o como participantes en una conferencia de la ONU, sostuvo.
Muchos gobiernos no están nada dispuestos a incluir a los medios en la cumbre. Para ellos, es suficiente mencionarlos y decir que son importantes, agregó el periodista suizo.
Cualquiera sea el resultado de la primera Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información, resulta claro que tanto los periodistas como los organizadores sienten estar avanzando sobre territorio virgen.
(*) Brian Thomson es corresponsal de la agencia de noticias InfoSud.
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