Los representantes de los 146 países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) parecen guiarse por la máxima de la diplomacia que aconseja, cuando es inevitable hacer concesiones, aplazar hasta último momento la negociación.
Ese principio se refleja en un documento que la OMC difundió este fin de semana, para que sirva como base de la declaración final de la V Conferencia Ministerial de ese organismo, convocada para la segunda semana de septiembre en el balneario sudoriental mexicano de Cancún.
El texto distribuido por el negociador uruguayo y actual presidente del consejo general de la OMC, Carlos Pérez del Castillo, presenta espacios en blanco en las partes donde deberían figurar las resoluciones.
Pérez del Castillo reconoció que por esa razón el documento adquiere un carácter "hasta cierto punto esquemático", y revela cuánto camino "hemos de recorrer en varias esferas clave" para cumplir los mandatos de Doha, donde se realizó en 2001 la anterior Conferencia Ministerial.
La Ronda de Doha fue presentada como una oportunidad para resarcir a los países en desarrollo por las concesiones que debieron hacer a las naciones industrializadas durante la Ronda Uruguay (1986-1994).
Sin embargo, la mayoría de los plazos establecidos para el desarrollo de las negociaciones de Doha han vencido en el último año sin que los Estados miembros concertaran siquiera mínimos acuerdos. Las dilaciones amenazan ahora a la última etapa del proceso.
El cumplimiento del mandato de negociaciones adoptado en Doha será sometido a escrutinio en Cancún, del 10 al 14 de septiembre.
Pero como demuestran los vacíos del texto de Pérez del Castillo, los países miembros de la OMC mantienen diferencias profundas en la gran mayoría de los temas, y especialmente en los más cruciales.
El texto se asemeja a un esqueleto porque los países ricos han defraudado en el cumplimiento del mandato de Doha, comentó a IPS Celine Charveriat, representante en Ginebra de Oxfam, organización no gubernamental humanitaria internacional con sede en Londres.
En particular, fallaron en los temas de acceso a medicinas de bajo precio en los países pobres y apertura del comercio agrícola, dijo Charveriat.
En el mundo industrializado, la Unión Europea está entre los principales interesados en dilatar al máximo las negociaciones. Los ministros de agricultura de ese bloque aprobaron a fines de junio una reforma de su política de sostén a los agricultores, y desde entonces no alteraron su oferta en la negociación agrícola.
El texto de Pérez del Castillo alude a un eventual acuerdo sobre las modalidades que se deberán adoptar para avanzar en la negociación agrícola, que tiene como fecha límite el 31 de diciembre de 2004.
Pero la última sesión antes de Cancún del comité de agricultura de la OMC, que concluyó este viernes, demostró que el estancamiento se mantiene.
El mismo panorama ofrecen otros asuntos de gran interés para el mundo en desarrollo, como los del trato comercial especial y diferenciado y la aplicación de acuerdos anteriores.
La agenda de Cancún se encuentra sobrecargada, sin que nada indique que en dos meses se podrá resolver lo que no se acordó en casi dos años de negociaciones, advirtió el representante de Argentina, Alfredo Chiaradía.
La semana venidera se realizará la última reunión ordinaria del consejo general de la OMC antes de Cancún. Pérez del Castillo confía lograr progresos en esas sesiones y en reuniones informales de jefes de delegaciones.
Los ministros de Comercio o de Relaciones Exteriores de unos 25 países mantendrán una conferencia informal en la sudoriental ciudad canadiense de Montreal, los días 28 y 29 de este mes, con la intención de reducir las diferencias.
La misión japonesa ante la OMC convocó a altos funcionarios de los mismos países que participarán en esa "miniministerial" de Montreal a una reunión en Ginebra, el martes próximo, para adelantar las discusiones.
Pérez del Castillo previó que el proceso de negociaciones se acelerará durante agosto. Es probable que el Consejo General, máximo organismo de la OMC durante los recesos de las conferencias ministeriales bianuales, vuelva a reunirse en la última semana de agosto para completar el texto del acuerdo.
El borrador presentado por Pérez del Castillo es un barómetro del estado actual de las negociaciones, y muestra un descenso apresurado de la presión, según Oxfam.
A la OMC le esperan negros nubarrones, a menos que los países ricos "hagan concesiones a los pobres, y rápidamente", previno Charveriat.