La crisis económica y la exclusión social se ensañan con los niños, niñas y adolescentes de América Latina, donde más de la mitad de los menores de 19 años viven en la pobreza, advirtió Unicef este viernes en Panamá.
Un estudio mundial divulgado por Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia) de modo simultáneo en varias capitales aseguró que millones de niños, en especial en las grandes ciudades, viven en un entorno de exclusión que amenaza sus vidas.
El capítulo de América Latina y el Caribe de esa investigación alerta de la grave situación de 120 millones de personas menores 19 años, según una proyección para 2002 sobre datos oficiales recogidos en 1999.
Nuestra conclusión es que los niños latinoamericanos y caribeños son desproporcionadamente más pobres que los adultos, comentó a IPS Ximena de la Barra, investigadora chilena de la oficina regional de Unicef con sede en Panamá.
En el trabajo titulado Pobreza y Exclusión en niños (as) de las ciudades se indica que los 120 millones de niños y adolescentes pobres equivalen a más de la mitad de la población menor de 19 años.
También se destaca que esa infancia pobre representa más de 50 por ciento de la población de la región en esa misma situación.
Las proyecciones de los técnicos de Unicef detallaron, además, que la pobreza abarca en la región a 83 millones de menores de 12 años, 59 por ciento de la población en esa franja etaria, mientras que en los adultos de 20 a 35 años alcanza a 44 por ciento.
Los especialistas se manifestaron alarmados con las cifras resultantes de la investigación, pues estiman que es situación llevó a que unos 20 millones de menores de 15 años no estudian por la necesidad de trabajar.
Para De la Barra, los adultos le están fallando a sus niños, pues los nuevos datos muestran un regreso a los indicadores sociales de los años 80, conocida como la década perdida por la crisis de la deuda externa, alta inflación y recesión.
Si la tendencia sigue así, el futuro está bastante amenazado. Por eso tenemos que invertir más en la creación de empleos para los adultos, así como en la educación y la alimentación de los pequeños, indicó.
El trabajo presentado por Unicef este viernes también puntualizó que el trabajo infantil está en alza y cada vez a edades más tempranas. El principal sector que absorbe esa mano de obra de niños y niñas es el de tareas domésticas.
Pero la pobreza varía de modo importante de un país a otro de América Latina y el Caribe.
Las estadísticas de 1999 indicaban que en Uruguay, Costa Rica y Cuba la pobreza no superaba 20 por ciento de los niños y adolescentes, mientras que en el otro extremo se ubicaban Honduras, Nicaragua y Ecuador, con 80 por ciento de menores pobres en las ciudades y 90 en el campo.
En tanto, Argentina mostraba una pobreza infantil cercana a 40 por ciento, pero ese indicador creció de modo alarmante tras el colapso económico de fines de 2001, señalaron los técnicos.
Los portavoces de Unicef en Panamá precisaron que en América Latina y el Caribe viven 220 millones de personas pobres de todas las edades, 83 millones de los cuales viven en la indigencia.
También explicaron que, de ese total de pobres, 140 millones viven en zonas urbanas. Esa tendencia es un reflejo del deterioro en la región de los derechos económicos, sociales y culturales, dijo a IPS el sociólogo Daniel Camacho.
Camacho, coordinador de la Comisión para la Defensa de los Derechos Humanos en Centroamérica, sostuvo que tras el fin de las dictaduras en la región, lejos de acabar los problemas sociales, éstos se están agudizando.
Los sectores sociales más vulnerables siempre son los mismos: las mujeres y los niños, puntualizó.
El estudio de Unicef añadió que las zonas rurales y las áreas perimetrales de las ciudades constituyen el principal foco de concentración de niños, niñas y adolescentes trabajadores.
Al menos 50 por ciento del trabajo prematuro se concentra en las comunidades campesinas, siguiendo en orden de importancia el sector informal urbano y el doméstico. Sólo 10 por ciento de los menores que trabajan los hacen en la economía formal.
Activistas en favor de la infancia sostienen que miles de niños en la región son víctimas, además de la pobreza, de problemas de desintegración familiar, de violencia callejera, drogas y de la llamada limpieza social practicada por las autoridades policiales.
La organización no gubernamental Casa Alianza precisó que Honduras es uno de los principales ejemplos de violación de los derechos de los niños en la región, con 1.550 ejecuciones extrajudiciales de niños y jóvenes menores de 23 años desde 1998.
Los niños son víctimas de la violencia, la indiferencia y la falta de oportunidades. No hay un solo país latinoamericano en el que todos sus niños en edad escolar tengan acceso a la educación, expresó a IPS el director de Casa Alianza para América Latina, Bruce Harris.
Este panorama tiene sus raíces en la falta de voluntad política de los gobiernos para invertir en la educación y el desarrollo social, añadió.
******** * Página oficial de Unicef (http://www.unicef- icdc.org/presscentre/newsroom/)
(