La mayor parte de los miembros del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) reclamaron este miércoles una solución pacífica a la crisis sobre la presunta posesión iraquí de armas de destrucción masiva.
La mayoría del Consejo está a favor de un desarme pacífico de Iraq y de otorgar más tiempo a las inspecciones de armas en ese país, dijo este miércoles a la prensa el embajador de Francia ante la ONU, Jean-Marc de la Sabliere.
Las inspecciones comenzaron hace sólo dos meses. Deberían continuar, añadió.
El Consejo de Seguridad se reunió este miércoles a puertas cerradas para discutir el informe presentado el lunes por el jefe de la Comisión de Control, Verificación e Inspección de las Naciones Unidas (Unmovic), Hans Blix, y por el director de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Mohamed El- Baradei.
El debate se llevó a cabo en el marco del discurso sobre el Estado de la Nación, pronunciado el martes por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en el que preparó a su país para una inminente guerra contra Iraq.
El embajador francés saludó la decisión estadounidense de presentar la semana próxima un informe al Consejo de Seguridad que, según el gobierno de Bush, probaría que Iraq aún posee esas armas. Es útil que los inspectores obtengan esa información, dijo De la Sabliere.
En cambio, el representante de Rusia ante el máximo órgano de seguridad de la ONU, Sergey Lavrov, advirtió que ese informe debe ser innegable y convincente, y añadió que las inspecciones son útiles, eficientes y deben continuar.
El secretario de Estado (canciller) de Estados Unidos, Colin Powell presentará el próximo miércoles al Consejo de Seguridad un informe de agencias de inteligencia de su país sobre Iraq.
Ese informe podría contener detalles sobre los presuntos vínculos iraquíes con organizaciones terroristas, como la red Al- Qaeda, a la que Estados Unidos responsabiliza de los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra su territorio, indicó el embajador de Estados Unidos ante la ONU, John Negroponte.
El representante de Siria, Mikhail Wehbe, recordó que ni Hans Blix, ni Mohamed El-Baradei han dicho nada acerca de un incumplimiento de la resolución 1441 del Consejo de Seguridad.
Dicha resolución obliga a Iraq a prestar completa colaboración a las misiones de inspección de armas y a entregar un informe completo acerca de sus programas de armamento.
Wehbe, quien representa la única nación árabe en el Consejo de Seguridad de 15 miembros, dijo a los periodistas que en el encuentro de este miércoles, 10 países se manifestaron a favor de otorgar más tiempo a las inspecciones. Tras describir la política estadounidense con Iraq como destructiva, el diplomático sirio añadió: Todos en la región (de Medio Oriente) dicen no a la guerra.
Otros integrantes no permanentes del Consejo rechazaron la postura estadounidense sobre las inspecciones.
La opinión general es que la inspección merece una oportunidad. No deseo decir por cuánto tiempo ni cuándo, apuntó el embajador de Pakistán, Munir Akram.
Aunque la cooperación iraquí no fue satisfactoria, el pedido de más tiempo hecho por los inspectores debe considerarse en forma positiva, apuntó el embajador de México, Adolfo Aguilar Zinser.
En noviembre, cuando Estados Unidos y Francia se enfrascaron en una batalla diplomática sobre el texto de la resolución 1441, México tomó distancia de su poderoso vecino.
También el embajador de Angola, Gaspar Martins, expresó su respaldo a la continuación de la misión de control, mientras muchos diplomáticos, entre ellos el francés De la Sabliere, señalaron que la resolución 1441 no establece plazos para su cumplimiento. Cientos de inspecciones se han realizado desde noviembre. Nunca antes los inspectores estuvieron tan bien equipados. No desperdiciemos la inversión que acabamos de hacer, exhortó el embajador de Alemania, Gunter Pleuger, quien ejerce la presidencia del Consejo.
Pero su llamado a la paz pareció naufragar cuando el embajador estadounidense Negroponte dijo ante más de 100 periodistas que la ventana diplomática se está cerrando. Se acerca rápidamente el tiempo de las decisiones. La situación es urgente. Es apremiante.
Interrogado por qué los inspectores no encontraron armas, Negroponte contestó: No es tarea de un inspector revisar cada piedra en Iraq. El peso de la prueba recae en definitiva sobre Iraq, que debe declarar en forma completa sus existencias de armas y cooperar incondicional, inmediata y proactivamente con los inspectores.
Algunos observadores estiman que la oportunidad para presentar una nueva resolución, que habilite una ofensiva militar podría ser crucial, aunque el gobierno de Bush no dará ningún paso antes de consultar a sus aliados.
Bush habló el martes con el canciller (primer ministro) de Alemania, Gerard Schroeder, respecto de la presentación del informe de inteligencia la semana próxima. Alemania es el país occidental que más firmemente se ha opuesto a la guerra contra Iraq.
Este jueves, Bush se reunirá con el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, y con el primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair, este viernes.
Mientras el Consejo sesionaba, a varias cuadras de la sede del foro mundial, miles de estadounidenses reunidos en la céntrica esquina de Times Square coreaban: No a la sangre por petróleo. No en nuestro nombre. (


