La virtual alianza política entre judíos y cristianos conservadores se afianza en Estados Unidos, según una encuesta que señala un apoyo mayoritario en estas dos comunidades religiosas a una guerra contra Iraq y Israel en su conflicto con el mundo árabe.
Los cristianos evangélicos constituyen la comunidad religiosa estadounidense que más respaldo brinda a una posible guerra contra Iraq para desalojar del poder al presidente Saddam Hussein, según la encuesta, divulgada este miércoles en Washington.
El estudio contratado por Stand for Israel, proyecto de la organización International Fellowship for Christians and Jews (IFCJ), indica que 69 por ciento de los cristianos conservadores entrevistados apoyan una eventual guerra, 10 puntos porcentuales más que entre la población adulta estadounidense en general.
Casi dos tercios de los cristianos evangélicos encuestados afirman, además, estar de acuerdo con las acciones de Israel contra el terrorismo palestino, proporción que se reduce a 54 por ciento de la población estadounidense.
El grupo que más respalda a Israel en Estados Unidos, fuera de los judíos, es el compuesto por los cristianos conservadores, declaró el copresidente de Stand for Israel y ex director ejecutivo de la Coalición Cristiana, Ralph Reed.
Ochenta por ciento de quienes se identifican como simpatizantes del gobernante Partido Republicano también respaldan una acción militar contra Iraq, según el sondeo realizado por la encuestadora republicana Tarrance Group.
El resultado de la encuesta podría tener importantes derivaciones en las elecciones legislativas de noviembre en Estados Unidos, en particular en lo que se refiere al voto de los judíos, tradicionalmente inclinado hacia el opositor Partido Demócrata, sostuvo Reed.
En las elecciones presidenciales de 2000, apenas 18 por ciento de los votantes judíos sufragaron por el actual mandatario, el republicano George W. Bush.
Hay una nueva apertura entre los votantes judíos para apoyar a este presidente y a otros republicanos que respaldan a Israel con fuerza, dijo Reed, para quien Bush podría acercarse en las elecciones presidenciales de 2004 al pico de 38 por ciento del voto judío alcanzado por Ronald Reagan en 1984.
Ochenta y uno por ciento de los judíos entrevistados perciben a Bush como un fuerte defensor de Israel, y 46 por ciento dijeron estar dispuestos a votarlo por la guerra contra el terrorismo que declaró tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Washington y Nueva York, atribuidos a radicales islámicos.
Dos tercios de los republicanos dijeron respaldar a Israel en su conflicto con el mundo árabe, mientras 46 por ciento de los demócratas respondieron lo mismo.
El mínimo aceptable es que Bush parece estar haciendo importantes incursiones en este grupo fuertemente demócrata, un hecho que podría tener impacto en los próximos dos ciclos electorales, dijo el presidente de Tarrance Group, Ed Goeas.
El estudio, para el cual se entrevistó a 1.200 personas la semana pasada, tiende a confirmar los datos de encuestas similares realizadas en los últimos años según las cuales la comunidad cristiana evangélica, que representa un tercio de la población adulta estadounidense, respalda con fuerza a Israel.
Tradicionalmente apolíticos, los cristianos evangélicos comenzaron a ser atendidos por Washington en 1976 cuando muchos ciudadanos de ese origen apoyaron la candidatura presidencial de Jimmy Carter, un cristiano renacido (reconfirmado en su fe).
Pero, desilusionados por la política liberal y la sensibilidad social de Cartar, quien gobernó entre 1977 y 1981, constituyeron una de las bases sociales principales de la Nueva Derecha que allanó el camino al primer triunfo electoral de Reagan en 1980.
Al mismo tiempo, los cristianos conservadores fueron también cortejados por el derechista partido israelí Likud, que percibió una cercanía políticamente útil por razones teológicas. Los evangelistas, según el Likud, deberían oponerse al retorno de Jerusalén y de Cisjordania al dominio árabe.
En 1979, según la investigadora Grace Halsell, el gobierno israelí entonces encabezado por el Likud obsequió a Jerry Falwell, principal figura de la Derecha Cristiana y líder de la denominada Mayoría Moral, su primer jet privado.
El gobierno israelí también organizó excursiones a Israel para cristianos evangélicos, que aportaron decenas de millones de dólares a agencias que financiaron la construcción de asentamientos judíos en territorios árabes ocupados.
Con oficinas en Chicago y en Jerusalén, IFCJ es desde 1983 un foro clave para estrechar el vínculo entre conservadores cristianos y judíos.
Cuando la violencia entre israelíes y palestinos recrudeció hace seis meses, IFCJ creó el proyecto Stand for Israel, con el objetivo de alentar el respaldo estratégico de líderes y bases de la comunidad cristiana al estado de Israel.
Los judíos apenas comienzan a entender la profundidad del apoyo que tienen entre los cristianos conservadores, dijo el rabino Yechiel Eckstein, fundador y director de IFCJ y copresidente judío de Stand for Israel.
Una vez que el potencial de esta inmensa reserva de buena voluntad sea entendida completamente por el pueblo judío y estratégicamente alentado por la campaña de Stand for Israel, se verá cómo aumenta dramáticamente el apoyo a Israel en Estdos Unidos, agregó Eckstein.
La encuesta parece dar razón a estas predicciones, al menos en parte. Dos tercios de los cristianos conservadores entrevistados afirmaron compartir con los judíos la misma perspectiva, o al menos una similar, sobre la lucha entre Israel y Palestina.
Reed y Eckstein también destacaron que el sondeo desacredita el concepto de que el respaldo cristiano a Israel se basa sobre la profecía del Nuevo Testamento bíblico de que la reconstrucción del antiguo reino judío de David culminaría con el fin de los tiempos y con el segundo advenimiento de Jesucristo.
Cincuenta y seis por ciento de los cristianos conservadores entrevistados aseguraron, en cambio, que su apoyo respondía a razones políticas, en particular los valores democráticos de Israel, su alianza con Estados Unidos en la guerra contra el terrorismo y su función como refugio de judíos perseguidos.
Apenas 28 por ciento de los encuestados optaron por la tesis apocalíptica. Por otra parte, casi dos tercios indicaron como princpal razón teológica para respaldar a Israel el concepto de que Dios le había dado su tierra a los judíos.
Esta encuesta confirma mi visión de que los cristianos son aliados confiables y vitales. He visto más cambios positivos en la relación entre judíos y cristianos en los últimos seis meses de los que vi en los últimos 25 años, sostuvo Eckstein.
Al informar sobre el resultado de la encuesta, Eckstein divulgó un vídeo de un minuto que será proyectado el domingo 20 de este mes en decenas de miles de iglesias que suman 3,2 millones de feligreses, en que se exhorta a los cristianos a orar por Israel, cuyos enemigos, dijo, atacan de nuevo.
Dios prometió bendecir a quienes bendicen a Israel, indica el vídeo, que contiene imágenes de violencia en Medio Oriente.
Reed admitió que no todos los cristianos conservadores apoyaban con tanto ahínco a Israel.
Cincuenta clérigos evangelistas declararon en las últimas semanas su oposición a una eventual acción militar contra Iraq, y al menos un grupo evangélico nacional pidió al gobierno de Bush una política más equilibrada entre Israel y Palestina.
Pero Reed insistió en que el punto de vista de Stand for Israel representa a la gran, gran mayoría de los cristianos evangélicos. (FIN/IPS/tra-eng/jl/mj/ip/02