ARGENTINA: El nuevo filón del turismo de salud

La devaluación de la moneda argentina alienta el flujo de turistas de salud, que buscan la calidad y bajos precios de ciertos tratamientos médicos de Argentina, y permiten compensar la pérdida interna de pacientes.

Los precios de tratamientos de rehabilitación neurológica, técnicas de fertilización asistida, cirugía cardiovascular e incluso estética bajaron sensiblemente por la depreciación de la moneda argentina frente al dólar, que llegó a 73 por ciento en lo que va del año.

En un contexto de profunda crisis económica y social, que se agravó en diciembre, instituciones privadas que ofrecen servicios de alta calidad médica han hallado una forma de compensar la caída de la demanda interna.

La Fundación de Lucha contra las Enfermedades Neurológicas de la Infancia inauguró en diciembre un centro de alta teconología destinado a la rehabilitación de niños, niñas y adultos, cuando sobrevino la crisis que provocó la caída del presidente Fernando de la Rúa.

La devaluación posterior dio a la fundación la oportunidad de reorientar sus servicios hacia varios países sudamericanos.

La institución se propone ahora ”destronar” a Cuba y Estados Unidos, líderes regionales en terapias para tratar secuelas neurológicas, traumatismos y accidentes cerebrovasculares, pues puede competir en calidad y en precios, en su nueva sede en la central localidad de Escobar, a 70 kilómetros de la capital.

En Cuba y Estados Unidos, el precio de estos tratamientos oscila entre 10.000 y 45.000 dólares, respectivamente, pero en Argentina pueden obtenerse por apenas 4.500 dólares, incluyendo alojamiento con baño privado para familiares o acompañantes, muy cerca del centro de salud.

También la Fundación Favoloro —creada por el prestigioso cirujano René Favaloro (1923-2000) para tratar enfermedades cardiovasculares—, procuró explorar el mercado latinoamericano. Pero pronto empezó a recibir consultas de pacientes de Europa, donde es reconocida la calidad de sus servicios.

Los centros que se dedican a técnicas de fertilización se inclinaron por publicar sus ofertas para pacientes extranjeros en la red informática Internet.

La proporción de pacientes extranjeros que consultan por tratamientos creció 50 por ciento este año, dijo a IPS María Fernanda Barro, encargada de relaciones institucionales de Halitus, instituto dedicado al área de fertilización asistida.

Los procedimientos cuestan ahora 3.500 pesos argentinos (menos de 1.000 dólares), pero en diciembre valían 3.500 dólares por la paridad forzosa un peso-un dólar, que rigió hasta entonces en el país.

Este tipo de tratamientos eran mucho más caros en Estados Unidos antes de la devaluación, pues rondan los 10.000 dólares, pero tras la depreciación del peso, la oferta argentina se hizo más conveniente, dijo Barro.

Halitus no ofrece una propuesta turística, pero aprovecha mejor algunas herramientas para asistir a pacientes del interior del país o del exterior, que requieren una segunda opinión médica, mediante las historias clínicas virtuales.

Desde hace tres años, el centro ofrece en Internet formularios de historia clínica para que la pareja que desea concebir un hijo los complete y reciba, a cambio, las indicaciones del instituto sobre los primeros pasos del tratamiento, que pueden llevarse a cabo en el país o localidad de origen.

De este modo, el viaje a Buenos Aires para el tramo terapéutico final se restringe a 10 o 15 días.

En cambio, otras instituciones ofrecen planes que incluyen tratamiento, alojamiento en hoteles y paseos para hacer más agradable la visita.

Como los procedimientos de fertilización se llevan a cabo por la mañana y no requieren más de un par de horas diarias de internación hospitalaria, las tardes se aprovechan para visitar atractivos turísticos de Buenos Aires.

Es el caso del Centro de Estudios en Ginecología y Reproducción, que abrió una oficina en la meridional ciudad estadounidense de Miami, para ser el primero en captar parejas de origen latinoamericano con problemas de esterilidad, que no logran conseguir un tratamiento efectivo y de bajo costo.

Así obtuvo un embarazo la pareja de argentinos residentes en Miami Hugo Zimmerman y Marcela Gutiérrez. ”Nos convencimos por los precios y también por la contención afectiva que encontramos en Argentina, que es difícil en Miami o Nueva York”, comentó Zimmerman.

La barrera del idioma impedía a su compañera someterse a tratamientos de este tipo en Estados Unidos. ”Por momentos me daba mucho temor no comprender bien qué me iban a hacer”, dijo Gutiérrez a un medio de prensa argentino.

La combinación de calidad y bajos precios tienta igualmente a quienes buscan someterse a cirugías estéticas.

El diario chileno ”La Tercera” aseguró en junio que se advertía un importante movimiento de interesados en técnicas estéticas hacia Argentina.

La clínica B&S, en la occidental provincia de Mendoza, fronteriza con Chile, aseguró que se duplicó desde mayo la demanda de pacientes chilenos, y también aumentó el flujo desde Bolivia, Colombia, México, Perú y Venezuela.

La cirujía estética en Argentina siempre tuvo demanda en el exterior por su buena calidad, según especialistas.

Pero la devaluación dio nuevo impulso a este sector. Una intervención para mejorar el aspecto de abdomen, cintura, mamas y nalgas cuesta en Chile 5.000 dólares y requiere anestesia total. En Argentina puede efectuarse por 2.000 dólares y con anestesia local. (FIN/IPS/mv/dcl/he/if/02)

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe