ECONOMIA-AMERICA LATINA: Inestabilidad permanente

La continua depreciación de las monedas de América Latina frente al dólar aumenta la inseguridad de una región asustada por la agonía de Argentina.

El real, creado en 1994 para poner fin a tres décadas de elevada inflación en Brasil, registró su menor valor este miércoles, al cerrar las operaciones cambiarias a 2,885 reales por cada dólar.

La devaluación del real respecto de la víspera fue de 2,2 por ciento, atribuida principalmente a la fuerte demanda de dólares provocada por la divulgación del supuesto fraude de la empresa estadounidense de telecomunicaciones WorldCom, que ocultó gastos por 3.800 millones de dólares.

El temor de la plaza cambiaria es que el escándalo de WorldCom cause mayores dificultades a las empresas de países en desarrollo para captar recursos en el exterior.

También contribuyó al nerviosismo la información de que el gobierno de Fernando Henrique Cardoso pretende elevar la meta de inflación del próximo año, fijada en 3,25 por ciento, con tolerancia de dos puntos porcentuales.

El riesgo país de Brasil (la posibilidad de suspensión de pagos, según la percepción de los inversionistas) volvió a crecer hasta rondar otra vez los 1.700 puntos, pasando al segundo lugar en el mundo detrás de Argentina.

La turbulencia era atribuida en días anteriores al posible triunfo del candidato presidencial del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inacio Lula da Silva, en las elecciones del 6 de octubre.

La moneda brasileña ya se devaluó 17,72 por ciento frente al dólar en lo que va del año, pese a que el ministro de Finanzas, Pedro Malán, y el presidente del Banco Central, Arminio Fraga, sostuvieron que el país tiene buenos fundamentos económicos y recursos para contener ataques especulativos.

El desembolso la semana pasada a Brasil de un crédito de 10.000 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI) no alcanzó para tranquilizar el mercado.

Tampoco contribuyeron a ese fin las declaraciones de Lula sobre su intención, en caso de llegar a la presidencia, de pagar la deuda externa, cumplir con los acuerdos con el FMI y de mantener las duras metas fiscales fijadas por el actual gobierno de Cardoso.

En tanto, en Argentina el dólar ya cuesta 3,95 pesos en las casas de cambio, donde incluso en algún momento de este miércoles superó la barrera psicológica de los cuatro pesos.

El descalabro de la moneda argentina fue constante desde enero, cuando se derogó la ley de convertibilidad que mantuvo la paridad cambiaria un peso-un dólar por más de 11 años.

Las variaciones del peso argentino son diarias, mientras se prolongan las negociaciones con el FMI, que niega repetidamente los préstamos solicitados por el gobierno de Eduardo Duhalde.

La ayuda financiera del FMI le permitiría a Argentina hacer frente a los vencimientos de la deuda, evitar la temida hiperinflación y mejorar algo el desempeño económico tras cuatro años de recesión, que elevó la pobreza a 51,4 por ciento de la población otrora más rica de América Latina.

El colapso argentino y la turbulencia de Brasil han contaminado otras monedas y economías, según los expertos.

En Chile, el dólar interbancario costaba 697,20 pesos el martes, 50 pesos más que a comienzos de junio. El nerviosismo tiene su origen en la incertidumbre brasileña, ”exagerada” debido a la campaña presidencial, señaló el ministro chileno de Economía, Jorge Rodríguez.

Valentin Carril, analista de la consultora Celfin, coincidió con Rodríguez respecto de que el peso volverá a los niveles anteriores después de las elecciones brasileñas de octubre.

También Uruguay se vio obligado a eliminar el jueves de la semana pasada el sistema cambiario de bandas (flotación sucia), que rigió desde comienzos de los años 90.

La economía uruguaya sumó así, a sus cuatro años consecutivos de recesión, una depreciación de su peso de 7,6 por ciento frente al dólar sólo en los últimos siete días.

Sin embargo, la turbulencia podría aumentar aún más en América Latina si Lula gana las elecciones, si es verdad que el mercado teme un gobierno izquierdista en Brasil. Todas las encuestas de opinión de voto ubican al frente al candidato del PT, y con bastante distancia de sus competidores.

Los efectos de la agitación ya se extienden más allá de América del Sur y alcanzó a México, donde su moneda también sufre la depreciación. El dólar se cotizó este miércoles a 10,10 pesos mexicanos por unidad.

Pero esa inestabilidad de la moneda mexicana no tiene la gravedad que algunos le atribuyen, según el Banco Central de ese país y Enrique Quintana, analista de economía del diario Reforma.

El peso mexicano se depreció sólo tres por ciento frente al dólar en los últimos 18 meses, luego de un largo periodo de una fortaleza monetaria que comenzó a afectar las exportaciones.

En momentos de turbulencia, la cotización del peso ante el dólar podrá moverse más, ”sin que ello implique mayor trastorno de la economía”, apuntó Quintana.

Los temores de una crisis más profunda y general en América Latina, sin embargo, reconocen también otros factores, como la recesión de Paraguay y Uruguay, afectados por la crisis argentina, y los problemas políticos que afrontan Colombia, Perú, Venezuela y el propio Paraguay.

La Sociedad Brasileña de Estudios de Empresas Transnacionales entiende que la fuga de capitales de Brasil no obedece al ”riesgo electoral” que presionaría la moneda sino a la ”crisis de liquidez de divisas” en el mundo.

El estudio de este centro, financiado por empresas y bancos internacionales, indica que la caída de los flujos de capitales a los países en desarrollo se debe a las pérdidas y endeudamiento de las empresas de países ricos, en especial de Estados Unidos.

Ese ”ajuste patrimonial” se comprueba por la caída de 13,64 por ciento en la bolsa de valores de Nueva York en los últimos 12 meses y de 40 por ciento en el índice Nasdaq, la bolsa de empresas de nuevas tecnologías. (FIN/IPS/mo/dm/if/02

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe