Organizaciones de la sociedad civil pidieron a la OMS y a los ministros de Salud que reconozcan y actúen ante los efectos desastrosos de las políticas económicas sobre el estado sanitario de la población.
El médico indio Ravi Narayan, representante del Movimiento por la Salud del Pueblo, explicó que la sociedad civil se encuentra preocupada, pues los resultados de la asociación de la OMS (Organización Mundial de la Salud) con el Banco Mundial no están llegando a los pobres.
Por su parte, Ellen Verheul, del grupo no gubernamental Wemos, con sede en Amsterdam, cuestionó a los gobiernos que dicen promover el acceso universal a la salud pública mientras apoyan la estrategia del Banco Mundial en favor de la comercialización de la atención sanitaria con los costos a cargo de los pacientes.
Las críticas de las organizaciones no gubernamentales se escucharon en presencia de la directora general de la OMS, Gro Harlem Brundtland, en una reunión informativa con motivo de la Asamblea Mundial de la Salud, que sesionó esta semana en Ginebra.
La mayoría de los reproches, que en algunos casos se extendieron también a la Organización Mundial de Comercio (OMC) y al Fondo Monetario Internacional (FMI), tuvieron por objetivo las orientaciones de las políticas de salud de las últimas décadas.
El director ejecutivo de la OMS, David Nabarro, negó que esa institución haya renunciado a su estrategia básicas de salud enfocada en la población, para aplicar otras impulsadas por las grandes empresas transnacionales.
Los 199 estados miembros de la OMS no han dado señales de compartir la idea de que la OMS haya abdicado su misión reguladora del sistema normativo internacional de salud, alegó el funcionario.
Por el contrario, los gobiernos incrementaron durante la presente Asamblea el número de tareas encomendadas a la OMS, lo cual prueba que continúan empleando las directivas y las regulaciones de la institución en la aplicación de sus políticas sanitarias.
Nabarro, en una rueda de prensa, desestimó también las críticas sobre el supuesto abandono por parte de la OMS de su política de Salud para Todos.
El presupuesto de la institución, que asciende a unos 1.250 millones de dólares por año y es sometido a permanentes recortes por los gobiernos, equivale apenas a ingresos de dos hospitales generales de distrito en Gran Bretaña, dijo a modo de ejemplo.
Con esos montos no se puede pretender que la OMS responda a las necesidades sanitarias del mundo entero, replicó Nabarro.
La OMS escuchó críticas similares formuladas en una reunión del Movimiento por la Salud del Pueblo de Africa, que se realizó en abril en Tanzania.
En Africa y en los demás continentes existen filiales del Movimiento por la Salud de los Pueblos, creado en diciembre de 2000 en Dacca, la capital de Bangladesh, para realizar una acción internacional en favor del objetivo de Salud para Todos.
En muchos países africanos, la mayoría de los afectados de síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida) reciben atención en instalaciones miserables, principalmente en el caso de mujeres que carecen de apoyo casi total de los servicios de salud y bienestar social.
La asamblea africana pidió entonces a su representante, Mwajuma Saiddy Masaiganah, que transmitiera a la OMS la oposición al empleo repetido de un mismo condón para mujeres y demandó la búsqueda de otras soluciones.
Esa cuestión es inaceptable para Africa, dijo Masaiganah, originaria de Tanzania. Por otra parte, las mujeres rurales no pueden afrontar la compra de un condón, que cuesta casi un dólar, pues muchas familias tanzanias no ganan esa suma en una semana, insistió.
En tanto, en América Latina se alcanzaron progresos con la aplicación de los programas de salud a partir de los años 60, principalmente en la erradicación de la viruela, la poliomielitis y el sarampión.
Sin embargo, los programas de ajuste estructural y los onerosos pagos de las deudas han afectado posteriormente los sistemas de salud, describió María Zúñiga, de Nicaragua, representante del Movimiento por la Salud del Pueblo en la región.
Una parábola parecida trazó el comportamiento de la inmunización en el mundo en las últimas décadas. La cobertura de inmunización creció sin pausa en todo el mundo hasta fines de los años 80, dijo Ravi Narayan.
Pero desde comienzos de 1990, como demuestran estadísticas de la OMS y del Banco Mundial, la inmunización cayó en India, en China y en otras partes, debido a las nuevas políticas económicas, expuso el profesional indio.
A su vez, Verheul señaló que en Europa también tienen que defender los sistemas de salud, pues se encuentran amenazados por las fuerzas del mercado, por ejemplo bajo el Acuerdo General sobre Comercio de Servicios (GCS), uno de los tratados regulados por la OMC.
La activista holandesa sostuvo que no puede aceptarse la actitud de gobiernos que apoyan la salud en la OMS, pero al mismo tiempo promueven la liberalización del comercio del servicios de salud en las negociaciones que se realizan en la OMC.
Como organizaciones de la sociedad civil, estamos dispuestos a trabajar con la OMS, pero aspiramos a que esa agencia especializada de la Organización de las Naciones Unidas asuma el liderazgo. (FIN/IPS/pc/dm/he/02